Epilogos...

12.2K 1K 60
                                    


Dante

La veo caminar hacia mí. La tarde soleada da un crisol de colores en el suelo a través de los cristales. Esta preciosa, su vestido es único, como es ella única. La mujer de mi vida. Llega a mí del brazo de su padre que esta emocionado sin ocultar sus lágrimas. Me da la mano de Atenea y ella me sonríe y esa sonrisa me ilumina más que todos los soles del universo. El sacerdote comienza la ceremonia y unos minutos después decimos nuestros votos

_ yo Dante Green te tomo a ti Atenea Stabros como legitima esposa, para amarte , protegerte y hacerte sonreí hasta mi último aliento_ ella sonríe emocionada y le coloco la alianza

_ Yo Atenea Stabros Tomekis te tomo a ti Dante Green como legitimo esposo para amarte, cuidarte y hacerte feliz hasta mi último aliento_ y me coloca la alianza

_ por el poder que me confiere la iglesia los declaro marido y mujer, puede besar a su esposa señor Green_

La beso y todos aplauden y los chicos de la oficina vitorean haciéndonos reír. Entonces ella me mira a los ojos y sonríe cómplice de pronto toma mi mano y la coloca en su vientre sobre el vestido. Entonces lo comprendo.

_ Cinco semanas..._ me susurra y mis ojos se llenan de emoción la tomo de la cintura y le digo

_ te amo con toda mi alma... los amo con toda mi alma..._

Atenea

Mi padre nos mira y comprende mi gesto y la emoción de Dante. Se nos acerca y nos abraza con fuerza. Luego la noticia se va regando y todos nos van felicitando.

La noche fue hermosa. Bailamos, nos reímos. Mi padre anuncio que él y Rebecca se irían a vivir juntos. Eso me hacía muy feliz. El padre de Dante estaba mucho mejor de salud y había comenzado a salir con una amiga de Rebecca. De Kario no supe nada más desde que había tenido problemas con la ley por librar cheques sin fondo.

No me preocupe más por él. Leónidas cambio rotundamente convirtiéndose en un hombre responsable y trabajador y al final se transformó en mi mano derecha en la agencia. Y era casi un padre para el niño pequeño de Lilian.

Dante me enamoro desde esa primera noche con su gentileza, sus hermosos ojos  y su profundo sentido del deber. Dejo todo por mí, porque acepto que estabamos enamorados sin remedio, me apoyo en el momento más difícil de mi vida y se convirtió en mi roca. En mi amor, en mi vida.

A veces el amor no necesita tiempo para madurar, solo necesita valentía y eso es lo que fuimos nosotros al darnos cuenta de nuestro amor. Fuimos valientes. Y el amor nos unio.

VALIENTESWhere stories live. Discover now