Prólogo

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Mi vida era buena, al menos cuando lo conocí. Brian Elwin Haner de 28 años, modelo en varias e importantes marcas de ropa masculina.
Nos presentaron en el primer año de secundaria al ser llevados a detención escolar por competir en quién dibujaba más obscenidades en los pasillos del instituto.
De vez en cuando solíamos salir ya que compartíamos los mismos "amigos" si es que así podrían llamarse, lo aclaro ya que a mediados del último año descubrí que solamente me soportaban por mi amiga Stacey. La pelirroja de pechos grandes.
Brian era sin duda el chico más guapo y conocido de la escuela,-y del mundo-lo cual era gracioso porque aumentaba su belleza al llevarse con el grupo de nerds.
Le encantaba vestir camisas negras, grises e incluso azules como mis colores favoritos, pantalones ajustados y rotos. Su look era al estilo de algún integrante de banda de rock muy sexy; Sin embargo el seguía siendo el hombre con más clase en la tierra. En una ocasión bebimos algunas cervezas al juntarnos entre amigos, pero después de terminar la escuela y dedicarnos a la dura realidad del trabajo dejamos de frecuentarnos y sólo nos veíamos por casualidad en alguna de las calles de Huntington Beach. Así que pudiese decir que sí mantenía una relación de compañerismo con ese chico.
Mi admiración era sumamente grande hacia él, su belleza era sobrenatural para este universo.
Sus ojos tenían un color tan bello. Las facciones de su rostro parecían ser detalladas por los mismísimos dioses, sus labios eran tan bellos que me hacían sentir en el borde de la demencia al imaginarios sobre los míos todo el día, su nariz... Tan sublime no podría ser narrada.
En pocas palabras, no existían adjetivos para describir la perfección de Brian Haner.
Nunca me imaginé que aquél hombre inalcanzable con apariencia de un mismísimo dios fuese el propietario de mis pesadillas y de mi futura indeficiencia para socializar.

Novio Psicópata |Synyster Gates|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora