Capitulo 14: No hagas eso

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Cuando supero su pequeño trauma de haber estado semi-desnuda frente a un hombre que sabía que deseaba y viceversa, se vistió y salio de aquella habitación dándose cuenta de lo bonito que era el sitio

-Vaya hasta que por fin sales, pensé que tendría que cargarte en mi hombro y traerte hasta aqui, gracias por no hacerme poner como un simio.

Intento no reír ante su comentario final pero fue imposible, de sus labios salio un risa traviesa y se sentó frente a el, aunque parecía una pequeña curiosa. que acaba de llegar por primera vez a la casa de su tío, aquel pensamiento le hizo gracia mental al varón. 

-¿Te gusta? -la miro fijamente, por alguna razón que quería negar estaba tratando de grabar todas sus expresiones en su memoria, cada linea facial, cada maña, cerro los ojos por un segundo para despejar su mente-

-Es lindo pero, ¿por que solo hay una habitación? -Él abrió los ojos cuando ella hablo, justo en ese momento ella pasaba un mechón de cabello por detrás de su oreja, dejando le ver su cuello-

-Es mía...-contesto antes de dejar que sus instintos básicos tomaran el control-

-¿como? -se miraron fijamente, contuvieron la respiración, ninguno sabía como volver a tomar la conversación, aunque el sonrió ligeramente y ella se sonrojo tan intensamente que poco a poco sus ojos comenzaron a nublarse por el agua que se acumulaba lentamente, Sebastián prefirió hablar antes de que sus sexos comenzaran a tomar el control-

-Deja de morderte el labio o voy a besarte, esa habitación es mía no es la única por cierto, y la compañía que he traído aquí no pasa la noche. principalmente por que no traigo mujeres aquí hace más de 4 años -seguía mordiéndose como evitando preguntar-Deja de morderte o de verdad te besare, y quita esa cara ninguna mujer ha dormido aquí aparte de ti...

-No es eso lo que preocupaba, puedes hacer lo que quieras no soy tu pareja ni nada...-susurro y aparto su mirar-

-Come, o se enfriara todo. -llevo la taza de café a sus labios sintiéndolo quemar a través de su garganta- caliente...-tosió-

-Estamos cerca del mar ¿cierto?...-la castaña miro al gran ventanal-

-Si, supongo que te diste cuenta por la sal en el aire...-se recargue en la silla-

-Algo así, no me has dicho que hacemos aquí...

-Bueno es mas como una reunión de negocios, es realmente aburrido venir solo -cerro los ojos escuchando las olas de fondo-

-¿Por eso me querías?...

-Si...

-rayos y yo traje varias cosas pero casi nada para playa, menudo desperdicio ir a una playa y no disfrutarla -hizo un chasquido con su lengua contra su paladar-

-¿por eso trajiste esa maleta tan enorme? -la miro con preocupación, sabía de su madre que una mujer puede meter un armario entero en una bolsa de basura si era necesario- Bueno, mi culpa...

-No importa, saldré a comprar algo adecuado.

La cara que pone de niña que recibirá un juguete nuevo por un momento le aturde, es la primera vez que la vía sonreír de esa manera, quería poseer sus labios hasta que doliese, aun así se limito a pasar sus nudillos por la mejilla de su compañía, en aquella escena digna de cualquier libro irrumpió la cocinera o más bien la mujer que mantenía el lugar en buenas condiciones.

-Buenos días señorita, vaya, mi chico tenia razón tienes unos ojos hermosos -sonrió-

-Te lo dije Miriam, no he visto unos ojos tan parecidos a la canela nunca...

-tienes razón, bueno espero que disfruten el desayuno, les he hecho tostadas con huevo y res, de bebida un cafe, espero que les guste.

Ella se retiro, Barbara no dijo nada, simplemente estaba sonrojada tomando el café. Se sentía avergonzada, no quería mirarlo, podía sentir su mirada sobre si y hacia el mayor esfuerzo por evitarlo, cuando terminaron de comer Miriam regreso y trajo unas galletas, antes de tomar una ella pregunto

-¿eras la novia de mi chico?

-Yo...am...n..

-no somos pareja Miriam, pero me gustaría, aun no me ha dicho que no.

¿Como podía decir aquello? nunca se lo a preguntado, no se conocen de nada ¿por que diría que si? "por que aceptaste venir sin motivo alguno" un pensamiento fugaz la invadió y maldijo a su conciencia por ser tan inoportuna

-¿cuando es la reunión?

-Mañana a medio dia.

-Bueno deberia comprar algo hoy..

-Te acompañare, tengo tiempo, mientras dormías trabaje hasta tarde, ademas hace mucho que no acompaño a una mujer de compras... -se mordió el labio, él se había levantada, ella recordó la advertencia que le hizo, giro la cabeza y el estaba al lado suyo-

-No lo hagas. . -tapo sus labios con la cuchara con la que había puesto azúcar al café-


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Ya se super corto, pero aproveche que me regreso la internet y la luz u.u espero que les guste el jueves si mi internet no me falla publicare 2 capitulos :3 que tengan dulces sueños muy sensualones *O*

Karli~


Sueños sexuales de una Virgen I: Primera vez (Terminada y en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora