La hija de Zeus (Percy Jackson #1)

Ψ Capítulo 8 Ψ

Esa mañana había amanecido un poco fría. Eran las seis y yo ya estaba despierta, aún quedaban tres horas para el desayuno.

Me encontraba a la orilla del lago, viendo el amanecer.

-Es realmente precioso ¿verdad?- dijo Percy sentándose a mi lado.

-Sí- dije sonriendo y acomodándome sobre las rocas.

-¿Qué haces aquí?- preguntó él.

-Podría preguntarte lo mismo- dije mirándole aquellos ojos azules tan hechizantes.

-Pero yo te lo he preguntado primero.

-No podía dormir y me gustó este sitio. Me ayuda a pensar... ¿Y tú?

-Prácticamente igual- dijo mostrándome los dientes al sonreir.

Estuvimos un rato callados. Me tumbé sobre las rocas de la orilla y él me miró con una sonrisa.

-Me gusta tu colgante- dijo cogiéndolo.

-Es bonito, ¿verdad?- dijo mirando el camafeo que colgaba de la cadena.- Es muy especial para mí.

-¿Se puede saber por qué?

Me levanté, quedando sentada a la misma altura que Percy.

-Es el único recuerdo que tengo de mi abuela.- dije con una sonrisa triste.- Me lo dio antes de morir, me dijo que así estaría siempre conmigo...

Las lágrimas resbalaban por mis mejillas y las palabras salían solas.

-Murió hace tan sólo dos años, estaba muy enferma. Fui a darla la comida y...- tomé aire, para que se me entendiese con claridad- Me... Me pidió que la abrazase. Me dijo que veía una luz, que debía seguirla... Pero antes se quitó el colgante y me lo colgó a mí del cuello, me dijo que estaríamos siempre unidas, que me cuidaría desde allí arriba, que me quería y me volvió a dar un abrazo, en ese abrazo pude notar como su corazón había dejado de latir... Falleció entre mis brazos. La echo mucho de menos, era mi segunda madre. Y cuando me siento mal, acaricio el camafeo y la siento ahí, a mi lado, dándome uno de esos abrazos que hacen que me reconforte y siga adelante.

Las lágrimas habían dejado de caer. Sollocé un par de veces.

-Wow... Yo... Lo... Lo siento.- dijo Percy, antes de darme un abrazo.

-Eres la primera persona que sabe la historia completa. Ni siquiera Marlen la sabe. Sólo te pido que sea un secreto... Por favor- dije con los ojos aún llenos de lágrimas.

-Está bien...- dijo él, acariciándome la espalda.

-¿Sabes? Últimamente me siento muy rara, en un segundo pudiese hacer cualquier cosa, pero al segundo siguiente me da el bajón y estoy llorando. Es como si algo malo fuese a pasar... Aunque ya me había pasado.

-¿Cuándo?- Percy me miró a los ojos, que ya no tenían lágrimas.

-Hace un año, sobre... ¿Junio? Sí, unas semanas antes del solsticio de verano. Ese día a medianoche se me "curó".

Percy abrió mucho los ojos.

-Cuando le robaron el rayo a Zeus...- dijo susurrando, lo suficientemente alto para que yo lo oyese.

-¿Cuando qué?

-Luego te explico... Ahora hay que avisar a Quirón- dijo levantándose y ofreciéndome su mano como ayuda para levantarme yo.