Hetalia VS Ringu [PAUSADA]

Nordic five

Y a todo esto, nuestra querida boy band favorita está disfrutando de un maratón de Power Rangers (eso da más miedo que Ringu). Están sentados y apelotonados en el sofá, con un bol de palomitas dulces en medio y discutiendo acerca de cuál de todas las nada cutres sagas de su serie preferida es la mejor. Bueno, salvo Dinamarca, que está preparándose unas palomitas para él porque Noruega no quiere darle.

-Anko, la tele está fallando.

Mientras se sienta en el sofá, el danés mira las siniestras imágenes de pozos que han aparecido de pronto.

-¡Hey, Sue! ¿No te pedí que la arreglases?

-Lo hice.

-Tranquilos, igual es una escena que no conocemos –trata de calmarlos Finlandia.

-No creo que en ningún episodio de los Power Rangers salgan niñas de pozos –dice fríamente Islandia.

El finlandés da un respingo, acercándose a Suecia, quien lo abraza posesivamente.

-¿Te da miedo, esposa?

-No digas tonterías, pero no dejes de abrazarme.

Noruega, aprovechando la situación, abraza asfixiantemente a su, entre comillas, hermanito.

-Tranquilo Ice, no tengas miedo. Onii-chan te protege.

-¡No tengo miedo! –exclama revolviéndose.

-¡El rey está aquí! ¡No tengáis miedo! –exclama Dinamarca intentando achuchar entre sus brazos a los nórdicos incestuosos (esta vez, Cinderella sí que lo aprueba).

-Apártate, Anko –dice Noruega arrojando al danés contra Sadako (sí, ladies and gentlemen, la señorita Sadako ya ha llegado).

¡Qué puntería tienen estos noruegos! El pobre y maltratado Dinamarca aterriza sobre Sadako. El jurado le da un 10 a Noruega.

-Hola guapa –así es, nosotras (y Japón) no somos las únicas que idolatramos la belleza asiática de Sadako-, ¿vienes mucho por aquí?

-*Murmullos avergonzados*

-Guau, nena, tus ojos son como la Luna.

¿Blancos y con manchas? No sé yo si ese es mejor piropo... pero bueno, lo importante es que Sadako se sonroja (¡aquí hay una nueva OTP!) y no lo mata.

-Anko, eres idiota –habla el noruego lanzándole un hada invisible.

-¡Ay! ¿A qué ha venido eso? –pregunta el danés levantándose.

-A nada, solo quería recordarte que lo eres y darte un golpe amistoso.

Tiene un don para la palabra y la expresividad este hombre, creo que se me van a saltar las lágrimas con tal juego de palabras.

Y viendo la situación y a la niña del pozo de inigualable belleza, Suecia aprieta su posesivo abrazo antes de decirle:

-Tú no eres mi esposa. Finlandia es mi esposa.

-Su-san, ¿qué dices? ¡Eh, espera! ¿A dónde vamos? –exclama Finlandia pataleando entre los brazos del sueco.

-Voy a demostrar que eres mi esposa.

-¡Ay no! ¡Ice! ¡Noru! ¡Din! ¡Salvadme!

-Le va a dejar el culo como la bandera de Japón... -dice Islandia por lo bajo.

-Para no variar –secunda Noruega.

Ora minna hokuou kara genki wo todoke ppe~

-Anko, apaga ese aparato infernal.

-Espera. Oh... Ice, Noru, voy a emborracharme.

-¿Qué? –dicen los dos al unísono.

-Vamos, no me digáis que no los veíais venir. Noru, si te llamo, coge mis llamadas. Y si hacéis incesto, mandadme fotos.

Y se va tal y como vino, sin haber probado una sola palomita de la bandera gay (los arcoíris son demasiado mainstream).

Noruega, una vez ha perdido de vista al danés, coge su broche-teléfono y lo apaga.

-Dinamarca te dijo que cogieras sus llamadas.

-No voy a recibirlas. Por cierto, ¿dónde está la niña?

-Allí –señala Islandia hacia la televisión-, corriendo hacia el pozo del que se escapó.

Nota de las autoras:

Ante las inexpresivas miradas de los dos nórdicos, Sadako optó por tirarse en bomba al pozo.