Dos cuerpos Un alma.

Capitulo 3. Aarón.

Desperte sin ganas de nada, tenia el estomago revuelto como si estuviera a punto de querer vomitar, después de lo que había pasado esa noche no queria hacer nada, en verdad que no queria casarme con Leonardo, era muy apuesto &atento, pero no lo amaba, nunca crei casarme sin amor, mi boda seria como un infierno, no queria pasar el resto de mi vida a su lado. Lo que me dolia aún más era que mi propia familia pretendiera casarme sin que yo quisiera.

-Coma señorita Ariana, le va a hacer daño, aunque sea un poco de manzana-. Pidió Eliza.

-No tengo ganas nana-. Suspire &me tire en la cama hacia atras mirando el techo e hice un ademán con la mano-. Tal vez alrato.

-¿Quieres ir al bosque? -. Sonrió de manera tentativa.

-¿Me ayudarias?-. Pregunte sin ocultar mi emoción. De inmediato me levante recargandome con los codos en la cama.

-Claro, pero primero debe de comer-. Condicióno maliciosamente.

-Si claro.

Me pare de un salto rápidamente &corri al comedor.

-Ariana no corras-. Alzó la voz mi madre cuando llegue al comedor.

-¿Que hay para desayunar?-. Me sente rapido a su lado opuesto ignorando su orden estaba muy ansiosa de poder salir del Castillo.

-Lo que quieras hija, hay fruta, huevo...

-Quiero fruta con miel-. Pedí interrumpiendo a mi mamá lo cual hizo que pusiera los ojos en blanco.

Una señora de la servidumbre corto en trozos fruta &les puso miel. A principio iba muy lento pero yo la apure con una mirada intimidante.

-Gracias-. Sonrei.

Comí lo mas rápido que pude por lo que mi mamá me estuvo diciendo "No comas rápido, las princesas no lo hacen" pero no me importo, queria salir lo mas rápido posible del Castillo.

Subí a mi habitación &me puse un vestido color morado.

-¿esta lista?-. Abrió la puerta mi nana &entro a mi habitación.

-Desde que desperte-. Sonrei.

-Princesa no se valla a tardar mucho, se ve el cielo gris, parece que caera una tormenta, llegue antes de que comienze-. Advirtió lentamente lo cuál me puso de nervios.

-Si nana, vamos-. Dije apresurada.

Caminamos hasta la parte tracera del Castillo &varias veces yo la apure, era la unica forma de salir del Castillo sin que nadie se diera cuenta &me detuvieran. Cómo era la princesa era muy "peligroso" que estuviera afuera, así que en varias ocasiones me habian detenido, pero muchas veces habia salido por horas &nunca me habia pasado nada, de hecho rara vez me encontraba con personas.

En cuanto puse un pie fuera de el corrí, a ningún lugar en especial, era el único momento donde mi madre no me regañaba por mis acciones. Me sentia libre, el aire despeino mi cabello &fue una sensación hermosa, respirar aire puro me sirvió para olviarme de todo lo que paso.

En un lugar con mucho sesped &arboles a su alrededor me acosté de espaldas, el sesped en mi cuerpo fue una sensación agradable voltee la cara &el sesped pico mi mejilla, eso me hizo amar aún mas este tiempo libre. Me puse boca arriba &comencé a leer, me encantaban los cuentos de princesas, eran trágicos pero llegaba un príncipe por cada una de ellas &yo tenía la esperanza de que un príncipe viniera por mi, claro excepto Leonardo.

El era mayor que yo, era apuesto con su pelo rubio &sus ojos color verde enmielado, pero el era lo contrario ami, ami me gustaba ser libre &a el le gustaba encerrarse todo el día, o por lo que hablamos asi era, nuestro matrimonio iba a ser un infierno. La verdad ni siquiera sabia si queria volver a verlo.