Capítulo 20

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[Pov- Alex]

Tenía mucho calor, tanto que me desperté a causa de ello, me pasé una mano por el cuello, estoy sudando mucho.

Miré a mi lado y noté que Damien no estaba, me senté en la cama y ¿bostece? Me siento cansado aún después de haber dormido, me puse la mano en la frente, ¡Estoy ardiendo! Bufando me acosté otra vez en la cama.

—¡Genial! Estoy enfermo. —Dije con sarcasmo para mi mismo.

—Lo estas, no irás a clases. —Escuché la voz de Damien, lo miré, el estaba saliendo del baño, estaba mojado y solo una toalla cubría su parte baja.

Me sonroje mientras me mordia el labio y devoraba a Damien con la mirada.

Pero luego fruncí el ceño, como estoy enfermo será mejor que no me acerque mucho a Damien, ¡tampoco podré besarlo! ¿Señor, por qué me haces esto? Pensé suspirando.

—No estoy tan mal como para no ir a clases. —Dije mirandolo mientras echaba mi cabello para atrás.

El me miró arqueando una ceja y se acercó a mi, puso su rostro frente al mío y me miró a los ojos, yo me puse algo nervioso por su escrupulosa mirada y desvíe la mía, el extendió su mano y tocó mi frente.

—Tienes fiebre, estás sudando mucho, en la habitación hace frío... —Dijo el señalando el aire acondicionado el cual estaba prendido, yo suspiré y aleje a Damien de mi.

—¿Y...? Ya se me pasará. —Dije restandole importancia mientras me paraba de la cama, el me miró con preocupación.

Cuando me levanté tuve que agarrarme a Damien ya que sentí mi cabeza dar vueltas, el me agarró firmemente y me acostó en la cama.

—Ya te hablé, no irás para ningún lado. —Dijo el con voz dura mientras me miraba fijamente.

Por el tono que uso conmigo lo miré como un cachorrito abandonado a medio camino, me tape con las sábanas y le di la espalda.

Lo escuché suspirar y acercarse, no moví ni un musculo. Me abrazó por atrás.

—Gatito, no quiero que te pase nada malo, por eso te pido que no vayas a clases. —Dijo el suavemente, yo me di la vuelta y lo miré.

Su mirada era sincera, lo rodeé con mis brazos y asentí mirandolo a los ojos, el sonrió y se alejo de mi, comenzando a vestirse.

Me quedé unos minutos mirando al techo.

Cuando volví a mirar hacia Damien noté que no llevaba el uniforme, miré el reloj de la pared, faltan diez minutos para que empiecen las clases, fruncí el ceño mirandolo.

—¿Por qué no llevas el uniforme? —Le pregunté mirandolo.

—Me quedaré aquí. —Dijo simplemente mientras se acercaba a su mini-nevera y sacaba una botella de agua.

Se acercó a mi con una sonrisa y me la pasó junto con unas pastillas.

—Tienes que ir a clases. —Dije seriamente, tomé las pastillas y me las bebí, el se sentó en la cama mirandome intensamente.

—No, me quedaré cuidandote. —Dijo el a la vez que apartaba mi cabello de la frente.

Se levantó y fue hasta el baño, yo suspiré, claro... Ya hago lo que el dice pero el no hace lo que le pido, el regresó con una pequeña toalla humeda, la puso sobre mi frente.

—¡Argggg! Damien estaré bien, tienes que ir a clases. —Le respondí mirandolo a los ojos, no quiero que Damien falte a clases por mi.

Vi su rostro lleno de frustración y preocupación, el parecía tener una batalla interna consigo mismo, Damien no es para nada expresivo delante de los demás, que el me muestre todo lo que siente me hace feliz.

Frío Como El Hielo (Homosexual/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora