15. Decisiones [Editado]

4.5K 231 9
                                    

Narra Nate

Sebastián tiene un buen brazo

Pero no tanto para dejarme inconsciente.

Aún tengo que hablar con Ellos sobre los asuntos pendientes.

Mandaron a Molly a decirme.

Oh por Dios.

Sonó a película de mafiosos.

Y ahora lo explicó. Todo paso hace tan solo unos meses.

*Flashback*

Es mi primer día y no dejare que sea como hace unos años.

Lucas me había abandonado junto a Scarlett.

Mi moto.

Estuve como vagabundo por todo el campus hasta que un chico, que parecía de último año, me entregó una nota y me dijo que si iba a aceptar le avisase.

Yo en la escuela primaria era un marginado nadie me hablaba a excepción de un chico, que pronto cambiaron a otro grupo. Él fue lo mas cercano a un amigo.

A mi nadie me hablaba por ser un niño con sobrepeso y también por usar lentes de pasta gruesa, no cambio mucho hasta noveno año de secundaria.

Mi hermano se decidió a ayudarme en callar le la boca a todas esas personas.

Eso parece como la trillada historia de la chica gorda donde baja de peso y al siguiente año a la escuela es la mas popular y deseada.

Solo que en versión masculina.

Me ayudo con todo incluso las chicas que antes se burlaban de mi ahora me pedían citas con tan solo haber tenido una noche.

Decían que me amaban, pero no les creí ni una palabra   

Nadie te puede amar solo por que ahora estas muy bueno.

Lo admito en esa época me volví un poco arrogante.

Solo un poco.

Aunque también en esa época me volví muy amigo de Lucas que estaba obsesionado con Gin.

Eso es raro.

Después de eso me fui corriendo a mi habitación.

Mala idea.

Mi habitación queda en el último piso.

Pero antes de irme me fui a la cafetería, pero lo que pasa es que una chica se tropieza conmigo y me cae la pizza en mi camisera blanca y su gaseosa en mi rizado cabello. 

Es que estaba tan perfecto. 

Y aquella chica arruino la seria mi primera impresión, la más importante en este nuevo lugar. 

- Que mas se puede esperar de una cuatro ojos, como esta la temperatura ahí abajo -bueno ella no es bajita, yo soy puto gigante.

Ella estaba tambaleándose por los nervios y sus mejillas se estaban poniendo rojas de la ira.

Se veía tan adorable y tierna, como una ardilla enojada, o más como un ratoncito paralizado.

-Cállate idiota aunque sea mi cerebro no esta fuera de la atmósfera terrestre.

Ella se quiso ir junto a su compañera pero la tome del brazo y la atraje hacia mi y la cargue en mi hombro.

Siempre me pregunte como se sentía cargar de esa manera, es asombroso.

Se siente el poder.

Joder soy un maldito Hulk, no soy Superman.

O si baby soy Superman y me desean.

NO otra típica nerd [Editando]Where stories live. Discover now