My sweet coffee [Yuta & Tú]

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My sweet coffee (mi dulce café) fue escrito por

Hace 4 meses que estoy acá por intercambio estudiantil. Solía estudiar en los Estados Unidos, pero la vida allá realmente es demasiado alocada para mí. Necesitaba un cambio y tuve la brillante idea de llegar hasta Asia. Japón es un país muy moderno, con una cultura muy diferente a la de occidente, por eso, decidí probar y llegar hasta acá. Pero todo mi viaje cambió en una noche..


>>>>>Flashback<<<<<

Mis pies sentían miedo a través de cada paso que daba. Una serie de hombres venían hacia mí. Tragué con brusquedad. 10pm, yo, una chica de 17 años, sola por las oscuras calles del centro de Osaka, Japón. Traté de no voltear, no quería ver el rostro de todos ellos mirándome. Hasta ahí llegó mi pensamiento de que en Japón todos son buenos, pero, realmente, en todos los lugares hay personas malas.

- Oye tú, muchachita – gritó uno de ellos, acercándose cada vez más a mí.
- Por favor déjeme en paz!! – le supliqué
- Estás bien bonita y joven, quieres que te demos un poco de diversión entre todos nosotros? - Sonrió maliciosamente otro de los hombres que venía en el grupo. Una lágrima caía por mi mejilla.
- La policía! – anunció alguien en aquel callejón. Su voz se oía juvenil.

Los hombres voltearon y una mano tomó mi antebrazo y me arrastró rápidamente hasta uno de los enormes basureros. Intenté gritar, pero su otra mano se posó en mi boca, impidiendo salida alguna de palabras. Asustada, comencé a sollozar, mientras los hombres, ya rendidos, se alejaban rumbo a quién sabe dónde. Volteé y me encontré con unos amplios ojos negros, unos labios gruesos y una expresión de miedo al igual que la mía. Nuestras respiraciones estaban agitadas. Él rompió el silencio:

- Te encuentras bien? – preguntó entrecortadamente.
- Sí, sí – asentí nerviosa – Disculpa, pero, quién eres? – observé sus facciones nuevamente.
- Oh, lo siento – se puso de pie, mientras se arreglaba la ropa – soy un muchacho que trabaja en el café que está a la vuelta – hizo una pequeña pausa – tuve que sacar la basura y te vi en problemas, las calles de Osaka a esta hora son muy peligrosas, sobre todo esta de acá. Donde trabajo hay muchas puertas y protecciones.
- Comprendo, soy una irresponsable – me puse de pie, con ayuda de él – la verdad te agradezco por lo que hiciste – miré hacia el suelo – llevo poco tiempo acá y esta es primera vez que me ocurre algo así.
- Yuta! Por qué te tardas demasiado?! – gruñó un hombre desde las afueras del café.
- Lo siento – hizo una reverencia – me debo ir, llega a salvo a casa! – sonrió ampliamente.

Solo me limité a decirle adiós con la mano, mientras aquella sonrisa no se borraba de mis pensamientos. "Yuta.. vaya nombre" pensé.

>>>>>Fin flashback<<<<<

Los días, semanas, meses pasaron demasiado rápido. Realmente no deseaba irme de Osaka. Cada vez que iba a la escuela pasaba por fuera de aquel café en donde Yuta trabajaba. Sentía que todo lo que estaba haciendo era totalmente ridículo, ya que pronto llegaría el día en que debía volver a mi verdadero hogar. Me convertí en clienta frecuente: un latte para mí con un pequeño muffin de regalo era lo que Yuta me entregaba cada vez que iba a verlo. El problema era que él tenía novia. Así es, un gran obstáculo para mí y aquel sentimiento que se formó por él.

- _______, qué bueno verte otra vez – la sonrisa de Yuta siempre me recibía cálidamente.
- Yuta, hola.. – respondí avergonzada.
- Lo de siempre? – lo detuve con mis débiles manos.
- Desearía charlar contigo después de tu trabajo. Puedes? – mi tono serio era impresionante.
- Ah – se sorprendió un poco – claro, puedes esperarme en aquel parque iluminado que está cerca del paradero del autobús, salgo de aquí en 30 minutos – sonrió gentilmente.

Sin mirarlo, corrí por la puerta. Qué diablos estaba haciendo? Quería declararme ante un chico ya comprometido? Volteé y vi que me estaba mirando. Mi corazón latía rápidamente. Caminé hacia el parque. Tome asiento en una banca cercana a un árbol y comencé a jugar con mis manos mientras observaba mis pies. De pronto, una silueta se sienta junto a mí.

- Ya que no pediste nada hoy, te traje tu latte de siempre – me entregó un vaso gigante y cálido – espero que te guste – sonrió.
- Yuta.. – comencé a hablar.
- Sé qué quieres decirme, _____ - me interrumpió – la verdad es que estoy saliendo con una chica, pero no puedo negar que desde aquella noche en que te vi en problemas, no pude sacarte de mi mente – su mirada se perdió.

>>>>>Flashback<<<<<

(Narra Yuta)

Haber "rescatado" a aquella chica fue lo mejor que me ha pasado durante toda mi vida. Es un poco exagerado, pero al conectar mi mirada con la suya, sentí que debía mantener el contacto con ella. Jinko, mi novia, es una chica fabulosa, pero _____ causó algo extraño en mí. No sé qué está haciendo acá en Japón, pero veo que es una colegiala. No lograré nada, porque algún día tendrá que irse. Realmente no sé qué hacer... Volví a casa, con la incertidumbre en el corazón. No pregunté su nombre, pero estoy totalmente seguro de que volveré a verla, no sé cómo, pero lo haré.

>>>>>Fin del Flashback<<<<<

- Me queda tan solo un mes aquí en Japón, Yuta –solté.
- Lo sospeché, es lo peor que podría estar escuchando en este momento... –volteó a mirarme.

- Qué ocurre? – lo miré a los ojos, sin temor alguno.

- Te deseo lo mejor, _____, espero que cumplas todos tus objetivos – se puso de pie rápidamente, caminando hacia el paradero y sin mirar hacia atrás.

Mi café cayó, esparramándose todo en aquel verde césped. Vi cómo se marchaba. Vi como el autobús avanzaba con él dentro. Hice el ridículo nuevamente. Y esta vez dolió.

>>>>>Último día en Osaka<<<<<

Después de aquella conversación en el parque, nunca más volví a ver a Yuta. Ya no trabajaba en el café y tampoco me tomé la molestia de averiguar en dónde se encontraba. Mis amigas de la escuela me organizaron una despedida y luego procedí a tomar mis maletas e irme rumbo al aeropuerto. Había aprendido bastante, pero también aprendí a encariñarme con un desconocido. Sin duda alguna, sería algo difícil de olvidar. Busqué mi asiento y me marché rumbo a mi hogar.

>>>>> Un mes después, en Estados Unidos<<<<<

Comienzan las vacaciones de verano. El sol era impresionante y me daba ánimos para salir a las calles de Nueva York. Fui a buscar mis últimas cosas a la escuela, la cual estaba casi completamente vacía. Al salir, vi a un joven muchacho en una esquina, preguntando por una persona mientras mostraba una foto. Traía un pequeño bolso y la gente solo lo ignoraba o le lanzaban uno queotro centavo. Curiosidad me causó, por lo cual me acerqué a él. Toqué su hombro, ya que estaba dándome la espalda.

- Disculpa, necesitas ayuda? – pregunté gentilmente.
- Busco a est- paró en seco, con los ojos muy abiertos.
- Cielos – mi corazón se detuvo – Yuta? – mis ojos comenzaron a cristalizarse.

- _____, esto es un milagro, jamás pensé que podría encontrarte – me abrazó fuertemente, abrazo al cual yo respondí de la misma forma.

Ambos nos separamos luego de unos minutos. Qué clase de locura era esta?


- Yuta, qué significa todo esto? – tomé su rostro entre mis manos.
- Significa que por fin pude venir a estudiar a los Estados Unidos y sobre todo, que te pude encontrar. No quería dejarte ir, sabía que no lo haría, solo necesitaba tiempo.

- Y tu novia? – pregunté curiosa

- Se supone que está en frente mío..

Me miró fijamente y procedió a besarme con aquellos labios suaves. Algunas personas aplaudían, otras ignoraban y no faltaban los que seguían dando centavos. Aquel beso era el comienzo de un bello amorío. Suena muy irreal, pero creo que si viajas al extranjero, puedes convertir tu experiencia en una aventura de amor que perdurará en el tiempo. Seguí besándolo, como si no hubiese mañana. Nakamoto Yuta volvió a mí.




NCT ONE-SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora