My streamer - Jaivo el mesmo

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Jaivo se sentó frente a mí, y por primera vez en mucho tiempo, sentí que el aire entre nosotros tenía algo distinto, algo que no podía ignorar.

Durante la cena Jaivo no toco el tema y abordamos temas triviales, las risas no hacian falta y poco a poco me fui sintiendo mas comoda

- Livie - volteé a verlo y pude notar su nerviosismo. - Quiero decirte algo -

- Ni te atrevas a pedirme ser tu novia porque te mando a volar - solté, amenazándolo, a lo que él lució sorprendido, pero solo soltó una risa.

- Definitivamente no planeaba hacer eso - agarró mi mano. - Debemos hablar sobre todo. Te mereces una explicación de por qué dije que no sentía nada por ti esa vez, cuando en realidad causas en mí sentimientos que ni yo mismo sé explicar. Y tú me debes una explicación de por qué tu ex - supuse que intentaba recordar el nombre.

- Carre, bueno, Rodrigo - le recordé.

- Ajá, él -

El aire entre nosotros se volvió un poco más pesado al mencionar el nombre de Rodrigo. Mi estómago dio un pequeño vuelco, y aunque intenté mantenerme tranquila, no pude evitar sentir que la conversación estaba tomando un giro importante. La tensión era palpable.

Jaivo apretó suavemente mi mano, como si quisiera darme un poco de seguridad, pero su mirada estaba perdida en algo más allá de mí, como si buscara las palabras adecuadas para abordar el tema.

- No entiendo, Livie. Qué pasó con Rodrigo? – Su voz era baja, casi como un susurro, pero la pregunta estaba cargada de curiosidad y algo de ansiedad.

Respiré hondo, mirando el plato vacío frente a mí mientras pensaba en cómo responder. La verdad sobre Rodrigo, sobre mi relación con él, nunca había sido fácil de explicar. Había sido un amor complicado, uno que se desvaneció sin que ni él ni yo pudiéramos evitarlo, pero el cómo terminó todo... eso era lo que realmente me había costado procesar.

- Fue... complicado – comencé, levantando la mirada hacia Jaivo, que aún me observaba atentamente. – Rodrigo y yo tuvimos buenos momentos, pero también muchos malos. De esos que no se olvidan fácil. Cuando terminamos, no fue por una sola razón. Fue por todo. Por cómo las cosas se fueron desmoronando poco a poco. Y no fue hasta que todo se terminó que me di cuenta de lo que había sido realmente.

Jaivo asintió lentamente, como si tratara de comprender cada palabra.

- Pero... eso significa que aún piensas en él? – preguntó, más como una duda interna que como una acusación. La pregunta quedó flotando en el aire, y la verdad era que no sabía cómo contestarla sin que sonara demasiado confusa.

- No... no en el sentido que crees – respondí finalmente. – Pero no puedo negar que en su momento, cuando todo acabó, hubo algo que me dolió más de lo que quería admitir. Y después, cuando me conociste, Jaivo... creo que estuve demasiado ocupada tratando de comprender lo que había pasado con él, que no me di cuenta de lo que realmente sentía por ti -

Jaivo guardó silencio, observando mi rostro, como si estuviera buscando algo detrás de mis palabras. Su rostro pasó de una ligera confusión a una expresión más tranquila, como si empezara a comprender el enredo en mi cabeza.

- Y ahora? – preguntó con suavidad, su tono un poco más bajo, como si la pregunta fuera algo personal para él también.

Mi corazón empezó a latir más fuerte, y aunque la respuesta era clara en mi mente, me costaba encontrar la forma de decirla en voz alta.