Jaune 10: Se Un Heroe

cap 12 una antorcha de la suerte

...si, no le pagan lo suficiente por esto.

-ugh, ¿Por qué estos mocosos siempre deben meterse?, ¿no pueden ir a sus campos de juego o algo así?, como me encantaría que simplemente desaparecieran y ya-. Pregunto Román, no pudiendo ocultar su irritación y deseo que se fueran, siendo en ese momento que noto como algo parecía brillar en el bolsillo donde guardo el amuleto.

En ese momento, un auto pasaría junto a ellos, arrojando una cáscara de banana a la acera, cosa que los 2 mocosos no parecían notar.

-esta bien Jaune, déjame me encargo de esto, llama a la polici-. Pyrrha daría un paso adelante pero justamente pisaría la cáscara de banana, haciendo que se fuera de frente al suelo.

En ese momento, un camión pasaría a toda velocidad, con rastro de aire detrás de él, que levantaría la falda de la pelirroja, para fortuna de Román, el estaba frente a ella, por lo que no vio nada.

El rubio, por otra parte, parece que acaba de verle hasta el alma a su chica, si la forma en que se acaba de congelar es una indicación, y como su rostro se a enrojecido.

Oh, y la chica parece que también se dio cuenta, porque no solo esta sonrojada sino que también parece estar temblando.

Ella se paro rápidamente, y por unos momentos se quedó congelada en su lugar, y el rubio, en su infinita sabiduría dijo...

-juro que no vi nada-. Felicidades amigo, lo arruinaste.

La reacción fue inmediata, la pelirroja salió disparada de allí corriendo y gritando, mientras una onda de choque negra se esparcía, arrojando todo objeto magnético al cielo a gran velocidad.

Y bueno, definitivamente no es metal, pero el reloj del chico parece tener algo magnético, si la forma en que parece que lo hubieran agarrado del brazo para arrojarlo al cielo es una indicación.

-¿¡PORQUE YOOOOOOoooooooºººººº?!-. Escucho al mocoso gritar mientras se iba volando antes de perderse de su visión.

Definitivamente viviría, pero tendrá problemas para hablar con su amiga, ahora bien, solo quedaba una cosa que hacer.

-PFFFFF JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA-. No aguantando, estalló en carcajada, esa había sido lo mejor que le había pasado en la última semana, ¡y para rematar se quedaron con todo el dust!, ohhh, Neo se va a molestar mucho cuando se entere de lo que se perdió.

Y hablando de Neo...

-parece que tenia razón sobre ti-. Pensó Román con una sonrisa, sacando el amuleto de su bolsillo, el cual aún brillaban de dorado, antes de apagarse y volver al color rosa.

Le iba a comprar mucho helado a Neo por este regalo.
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-debo decirlo Román, me sorprendiste, te felicitó-. Escucho a Cinder hablar, mientras lo miraba, mientras detrás de ella, podía ver la molestia en los ojos de los mocosos, je tanto que les gusta verlo siendo amenazado?, lo siento enanos, hoy no, El gran Román se sacó la lotería.

Después de descubrir lo del amuleto, llevo a cabo varios robos seguidos, y todos fueron un éxito, ¿la policía interrumpió?,  sus motores fallaron, un camión de atravesó, o sus neumáticos se pincharon porque a unos tipos se les rompió un vidrio.

¿Apareció el mocoso cambia formas?, un piano (quien sabe de donde salió) le cayó encima al del agua, los policías le dispararon al de Diamante, el cual luego se cayó en un agujero en la carretera que se abrió gracias a su peso y la mala infraestructura o unos bomberos trataron de apagar al de fuego

¿Apareció un cazador?, su arma se trabo, mientras en el apartamento de al lado, alguien se enojaba y lanzaba su televisor por la ventana cayéndole en la cabeza, para luego ser atropellado y pisado por un caballo, y finalmente orinado por un perro, mientras una maceta le caía en la espalda al hombre