Rechazo(Yeongyu)

Final

Aron no me acompaña, prefiero que se centre en estudiar y descansar. Ya hace demasiadas cosas y pronto llegará la fecha en que los reclutas de su generación obtengan su primera transformación. La verdad es que falta un mes para dicho evento y que simplemente no quiero que él vea a su alfa en este estado, ni yo me sentiría libre de actuar si el moreno observa. En cambio, decidí aprovechar que por su excelente rendimiento en el campo los reclutas lo adoptaron como una clase de representante o líder del grupo.

Moa, por otro lado, sujeta mi cabello entre sus delicadas manos. Y su pequeño y suave tacto de alguna forma me da fuerzas, aliento y la tranquilidad que necesito para seguir adelante. Su presencia, aunque algunos la relacionan a una carga, me alivia.

Respiré hondo sujetando el picaporte. Intento entrar siempre con la mejor de las energías incluso si al despedirme salgo deprimido y con ganas de llorar. En si quiero hacerlo en todo momento, pero no delante de Yeonjun. No lo permitiré ahí, y por eso tardo estos segundos en calmarme.

-Beom

-Esa voz...

Justo cuando estaba por calmarme volteé por el llamado.

-Taehyun, Yeji.

Encaré a los dos rubios con la mejor sonrisa posible. Ambos se acercaron manteniendo la distancia no solo conmigo, sino incluso entre ellos. Tras el ataque Yeji regresó a Oldiver para cuidar de la manada, así que es la primera vez que los tres nos reunimos desde aquella noche. Estoy tenso, y por el movimiento de la cachorra en mis brazos, ella lo siente.

-Ustedes se deben una charla -dijo ella. -¿Quieres que lleve a Moa? Mi hermano le trajo un regalo.

Negué con la cabeza y acomodé mejor a la pequeña en mis brazos. Elian, Felix y Aron desarrollaron una especie de competencia por pasar tiempo con ella en estos últimos días. La rubia no dijo nada más. Solo nos sonrió y le dirigió a su mate una última mirada que sentí eterna. Taehyun y yo quedamos a solas, él evitaba el contacto visual y su corazón estaba algo acelerado.

-¿Prefieres hablar en otro lado? -dijo.

-Sabes que no me gustan los rodeos, Taehyun -suspiré-. Lo siento, no quise atacarlos esa noche y nunca quise que te vieras involucrado en todo esto... -quise ser directo y expresar todo lo que pensaba cuando intenté ir detrás suyo.

-¡No! -me cortó- Por favor, Beom, yo soy quien quiere disculparse, ¡tú intentabas cuidarme y me comporté como un idiota! Si yo no hubiera desconfiado de ti... -exhaló con fuerza. -No sabía cómo enfrentarte, no después de la forma en que traté. En ese momento, no sé qué pasó -algo desesperado se acercó. -Jamás hubiera querido gritarte, y no sé... realmente no sé...

-Fue tu instinto, lo sé-traté de tomar su mano; lo permitió.- En serio te agradezco que lo hicieras. Impediste una masacre, no te sientas mal por ello.

-No lo entiendo- sus ojos se pusieron cristalinos-. Mis sentidos, la fuerza, el cambio-negó-, todos mis pensamientos y sentimientos se sienten... diferentes.

-Las cosas cambiaron en muy poco tiempo. Desearía haber actuado de otra forma, pero no podemos cambiar el pasado -mis ojos picaban-. Taehyun, yo te amo. Elegí hacerlo, у por ese amor quiero tu felicidad.

Al fin ambos juntamos el valor para mirarnos fijamente. Solo la diosa sabe cuánto dolió ver ese par de esmeraldas que antes me dedicaban tanta admiración y devoción para entender que ya no había espacio para ello.

-Nosotros...

-Ya no hay un nosotros -sentencié.-A la larga nos haríamos daño y a quienes nos rodean -él apretó mi mano-. Te agradezco el haberme hecho feliz, y créeme que desde lo más profundo de mi ser espero poder volver a ser amigos. No quiero perderte.