Goku en Naruto, el super saiyajin perdido.

Las dos naves....

Tres días pasaron desde que Goku conoció al maestro Jiraiya y comenzó el entrenamiento de Naruto como había prometido. En ese pequeño lapso, Naruto pasó las dos pruebas que Goku le puso: la del árbol y quedarse allí parado, y cierta prueba física que resultó más fácil que la otra, algo que a Goku no le sorprendió, ya que los ninjas tenían un nivel de poder promedio muy cercano al que tuvo él en los distintos torneos de artes marciales, Naruto pudo con ello.
Jiraiya no se separó del dúo durante esos días, ya que quería supervisar el progreso de su pupilo así como el método y las habilidades del muchacho recién llegado a la aldea.

Nos movemos nuevamente al campo de entrenamiento número 7, donde Naruto y sos dos maestros estaban practicando. Más bien, Naruto estaba frente a Goku, quien lo miraba de brazos cruzados y expectante junto a Jiraiya, que estaba sentado en un enorme sapo al que invocó.

Goku: No, Naruto, no entiendes el concepto. No se trata de un jutsu, es una técnica diferente, los sellos de mano, aunque parezcan ilógicos, con los que ayudan a canalizar tu chakra para poder usarla. Quiero que liberes tu chakra de una manera diferente.

Naruto estaba con los ojos cerrados tratando de concentrarse mientras hacía algunos sellos de mano, pero no fue capaz de liberar el Chakra que su otro maestro estaba esperando que pudiese lograr.
El chico no podía lograrlo por más que se estaba esforzando con todo el corazón, pero no tenía mucha presión; Goku sabía que esta técnica no sería algo sencillo no sólo para Naruto sino para cualquier ninja acostumbrado a usar solo sus Jutsus de forma convencional.

Naruto: ¡Grrr... es muy difícil!