INSTINCT

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Después de enviar un correo electrónico a Ned, vuelve a dormirse

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Después de enviar un correo electrónico a Ned, vuelve a dormirse.

Es un sueño largo, pero agitado, y cuando despierta en algún momento de la tarde, demora un poco en orientarse.

Se queda mirando el techo durante treinta segundos, esperando que la pintura blanca se convierta en cualquier momento en el listón roto de la litera de Felipe.

Al contrario de lo que imagina, el blanco permanece y lo siguiente que hace es mirar el teléfono.

Esperaba ver una respuesta de Ned, no ver diecisiete respuestas, la primera de las cuales es OH MY GOD!!!!!, varias de las cuales son completamente incoherentes y la última dice:

——"Estoy fuera".

¿Afuera?

Peter se queda mirando la palabra durante un buen rato, preguntándose si no será una error de tipeo.

¿Fuera de qué?

Es entonces cuando se da cuenta de que se oyen voces en el salón.

Peter levanta la vista, su puerta está entreabierta, lo que deja pasar las voces. Una de ellas, aunque amortiguada, la reconoce como la de Skip, pero la otra...

Prácticamente tropieza consigo mismo en su prisa por salir de la cama.

En el salón, dos figuras están sentadas en el sofá, de espaldas al pasillo. Incluso sentado, Skip se eleva por encima de la segunda figura, que tiene el pelo negro y los hombros redondeados y rebota ligeramente mientras le dice algo a al mayor que Peter no alcanza a oír.

——"¿Ned?"

El mencionado y Skip se giran para mirarlo.

Siente una oleada de felicidad, euforia, incredulidad: es Ned, su Ned, sentado en el salón del apartamento que llama ahora su hogar, cuando hace apenas unas horas estaba seguro de que no volvería a verlo.

Peter se adelanta cuando Ned se pone en pie de un salto y luego...

...se congela.

Tan repentinamente como surgió la felicidad, se desvanece en un frente frío de espanto, tan poderoso que tarda un momento en comprenderlo, e incluso entonces no está seguro de entenderlo:

¿No se supone que debería estar feliz de ver a su mejor amigo?

Pero no lo está.

Está... la única palabra para lo que siente es terror.

Peter es una maldición, un tabú, y aunque puede aceptarlo por sí mismo, incluso vivir con ello, especialmente cuando puede utilizarlo para ayudar a la gente que le rodea, nunca, nunca, nunca desea que Ned se vea atrapado en el terrible torbellino de mala fortuna que es su vida.

THE THIRD OPTIONWhere stories live. Discover now