-¿No puedes ir a buscarlo?

-¿Crees que te llamaría si yo pudiera?

-no tengo dudas de donde heredé la ironía- Me llamaron a último momento, la caravana de una de las manadas se adelantó y debo ir.

-¿Y Taehyun?

-Es tu novio, búscalo.

-¡P...pero...! -genial: ella cortó el link...

-Papá, debo irme.

-Pero aún no hemos terminado.

Como Beta, damos el ejemplo; y abandonar un entrenamiento no es la mejor prueba de ello.

-¿No? Solo míralos, es obvio que no pueden seguir. Te veré más tarde.

Antes de que replicase, me transformé y salí corriendo. Luego le explico y recibo mi reprimenda. Taehyun es mi prioridad.

Mientras recorría el pueblo en busca de su aroma, vi como muchos inclinaban la cabeza. Tori andaba con el ego por las nubes, pero no me quejo; merecía lucirse. Gracias al tratado con los hechiceros, nuestra ropa ya no se destruye durante las transformaciones; por lo cual solo debía encontrar a Taehyun y tomar una distancia prudente antes de volver a mi forma humana. Un plan simple. Encuentro a Taehyun, me transformo, lo llevo a casa y luego lo envío de vuelta a nuestro hogar lejos de la manada antes que cause problemas.

Capté su rastro en dirección al bosque y me asusté al notar que no andaba solo.

-Vamos, diosa; ¿acaso siempre debe ser así?

Bajé mi velocidad y me puse en guardia: esos lobos no eran de mi manada. Taehyun fue rodeado, tres lobos se le acercaban lentamente, y una en forma de humana los dirigía.

-¿Quién eres? ¿Qué hace un humano en un lugar así?

-¿U... un humano...? -Taehyun retrocedió intimidado por su voz- S... su líder, Yeonjun. Él me dijo que... que estaba bien si me quedaba...

La chica largó una pequeña risa.

-Lástima que no seguimos las ordenes de Yeonjun.

Los lobos comenzaron a gruñir, ya vi suficiente. Lo iban a devorar así que salté de mi escondite para interponerme.

-¡Tori!

Los tres omegas retrocedieron por mi tamaño.

-¿A quién tenemos aquí? -la mujer volvió a tomar la palabra - ¿Un beta arriesgando su vida por un humano? No me digas que este rubio es tu mate... ella se detuvo un segundo para olfatear - Oh, no lo es.

Enseñé mis colmillos y cubrí por completo al rubio detrás de mí.

-¿De verdad crees que podrás ganarnos?

¿La verdad? Los tres omegas no son un inconveniente; es ella la única que representa una verdadera amenaza. Es una beta salvaje y sé que ningún lobo alardea sin estar seguro de que saldrá victorioso. Ellos no pueden dejarnos ir y yo tampoco. Se infiltraron de manera hostil en un territorio que no les corresponde, y eso se castiga con la muerte. No me importa luchar u arriesgarme, pero tengo un humano que cuidar. Que por más que me duela admitirlo, es un ser débil e indefenso que aprovecharán para mantenerme controlada. Mis opciones se limitan.

Llámalo! -gritaba en mi cabeza.

-No puedo.

-Es tu orgullo, o Taehyun.

Tori tiene un punto; llamar a Yeonjun es lo más conveniente, ya que mis padres están ocupados y mi instinto es pedirle socorro a mi alfa, a mi mate, quien me encontraría más rápido que cualquier otro ser en el universo por nuestro vínculo y por su casta. Sería hipócrita y descarado de mi parte. Y mientras retrocedía, la beta sonreía por acorralarme lentamente a la vez que sus omegas se organizaban para dar pequeños amagues de los cuales me cubría y respondía.

Rechazo(Yeongyu)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant