Silencio, lágrimas y accidentes

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El maratón iba en su mejor parte cuando Aaron nos llamó para ir a comer. Cuando bajé, el ambiente se tornó tenso. Bueno, lo estaba antes de bajar.

- Chicos, ¿qué pasa?- pregunté asustada.

Cameron se mordió el labio y Hayes ocultó su cabeza entre sus brazos.

- Danielle, llamaron desde Charlotte -empezó Carter-. Y dijeron que...

Entonces, todos se detuvieron. Nash tenía la mirada fija en mí, aunque yo no en él. Solamente era capaz de mirar a Shawn, como su espalda se contraía con fuerza para luego volver a soltarse. Hayes tenía los ojos enrojecidos y unas lágrimas se escapaban de sus ojos.

- ¿Qué pasa?- pregunté.

- Dan, hubo una fiesta a la que tus amigos fueron -me explicó Matthew-. Caspar, Carly, Tyler, Alfie y Joe...

- Cuando iban saliendo de la fiesta -siguió Jack Gilinsky-, Caspar iba manejando porque Alfie estaba ebrio. De la nada, un tarado apareció y...

- ¿Qué?- pregunté a secas, sintiendo que sabía que pasaría al final.

- Tuvieron un accidente, Danielle- terminó Jack Johnson.

Mi corazón se detuvo, no podía respirar. Carly, Caspar, Tyler, Alfie... Joe. Mis amigos tuvieron un accidente.

- Tu tía Alice dice que todos siguen con vida, pero...- Jack Gilinsky no pudo terminar y rompió en llanto.

- Joe y Carly están en Cuidados Intensivos -dijo Aaron, con una voz que no se de donde salió-. Carly está en coma.

Mi mundo se fue abajo.

- Pero... pero ¿cómo? -empecé con fuerzas- ¡Carly estaba aquí anteayer! ¡Sonreía, estaba maquillada, cumplía sus sueños, era feliz!

- Dicen que nada es seguro, Danielle -dijo Cameron, calmándome-. El accidente fue grave, el auto quedó destruido y el bastardo que lo causó está en la cárcel. Pero todos llegaron con vida al hospital. Tu tía Alice y tu tío Barker están cuidándolos y dicen que llamarán si algo nuevo sucede.

Hayes se levantó y lo próximo que sentí fueron sus brazos rodeándome. No me quejé, a pesar de que Shawn estuviera presente, porque lo único que necesitaba era un abrazo. Un hombro en el cual tirarme a llorar como una vez lloré cuando sentí que nadie me veía.

Cuando sentí que estaba sola en una habitación llena de gente.

Cuando fallé mi primera acrobacia y me fracturé la pierna.

Cuando no encontraba a mi tía en un centro comercial.

Cuando reprobé mi primer examen de matemáticas.

Cuando no me aceptaron en la escuela de danzas del estado.

Cuando mis padres se divorciaron.

Cuando el mismo chico que ahora me está abrazando me daba la espalda.

Cuando mi corazón se rompió por primera vez.

Y cada vez que mi corazón se rompe, lloro. Arruinando por completo mi maquillaje, sin importarme mi apariencia o si me veo bonita.

Eso fue tan Sia... la única mujer en el mundo que sabe como describirme exactamente en estos momentos.

- Danielle, se fuerte -me susurró Hayes al oído-. Se fuerte por ellos.

- No puedo ser fuerte, Hayes. Es mi familia, lo único que tengo.

- Tienes una nueva familia -me respondió-. No reemplazará nunca a la vieja, pero al menos siempre estará aquí, Dan.

Lo abracé más fuerte, eso es lo más cerca que he estado del Hayes que conocí en 6° grado. Besó mi frente y nos quedamos todos en vela esperando una llamada, un mensaje... algo que me dijera que todo esto no es más que una pesadilla.



The Magcon GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora