Capitulo 12

5 1 0
                                    


Aiden entro conmigo al servicio. Era super incomodo, y eso que no era la primera vez que me acompañaba a mear. ¡Dios, ya había estado borrachas antes! No se porque se estaba preocupando tanto. ¿Es por todo lo de ser amigos de nuevo como siempre?

Intente quitarme el pantalón, sin éxito.

Suspiré –¿Aiden? – abrí la puerta un poco – ¿Puedes ayudarme a quitarme el pantalón? No estoy atinando, y juro que me meo encima.

Intento meter las manos por el trozo de puerta que le deje abierta.

–Cass, por dios – intento abrir la puerta mas – Así no puedo quitarte el botón del vaquero. ¡Deja de moverte!

Me empecé a descojonar. La cabeza me seguía dando vueltas, y cada vez me estaba meando más – Venga Aiden.

Empujo mas la puerta hasta que entro y me sentó del golpe en el retrete. Los dos nos miramos y empezamos a descojonarnos. Era ridícula la situación.

–¿Estas bien? – me dijo levantándome y poniendo sus manos de nuevo en mi botón – ¿No vas a vomitar, ¿verdad?

–Estoy bien – logre decir – Gra-a-cias. Por lo del botón – note como sus manos se posaban en mi delantera. Estaban frías y yo, nerviosa.

Nos quedamos unos minutos en silencio, cuando oímos que alguien me llamaba.

–Cass – oí de una voz familiar – Cass ¿Estas ahí?

Aiden me miro fijamente –¿Te llama Cass? – susurro – Yo soy el único que te puede llamar así

Me reí. Me reí muy fuerte.

–Cass – volvió a decir la voz familiar – Soy Lucas. ¿Estás ahí?

Aiden salió por la puerta – ¡Estamos! – dijo mientras se acercaba a Lucas – ¿Tu eres?

–Lu-Lucas – se sonrojo – Perdona, no quería interrumpir.

–No interrumpes nada ¿Verdad Cass? – volvió a mirarme – Solo necesitaba ayuda, y la he ayudado – me guiño un ojo – ¡Hasta luego Cass!

Cerré la puerta del servicio rápidamente, y me senté en el retrete. ¡Solo quería hacer pis!

No sabía si Lucas seguiría esperándome fuera, o del numerito de Aiden, había huido de mi. Me levante tambaleándome y esta vez el botón se deslizo fácilmente al abrocharse. Podría haber sido fácil antes.

–¡Aquí estoy! Bu – sonreí sacando los dientes.

–¡Estaba preocupado por ti! Pense que te habías caido, abierto la cabeza, o cualquier cosa desagradable – suspiro.

–¿Yo? – me levante la camiseta, para que comprobase que estaba bien – ¡Mirame! Estoy como una rosa – grite

–¡Cassie! – corrió hacia mi a bajarme la camiseta

–¿No te gusto? – hice pucheros – ¿No te gusta lo que ves?

Lucas negó con la cabeza.

–¿Eres gay? ¿Tienes novio? – todo me estaba dando vueltas.

–¡No! – dijo alejándose de mi – No habría problema si lo fuera, pero no lo soy.

–¿Entonces? ¿No te gusta lo que ves? – dije volviendo a subirme la camiseta y acercándome mas a él – ¿Enserio?

Noté sus manos en mis cintura, aferrándose a mi cuerpo con firmeza, no sobresalte. Sus manos eran cálidas, y me transmitían el calor.

–¿Crees que soy gay? – dijo dándome cortos besos en el cuello – Solo que estas borracha Cassie – casi susurro a mi oído – Mañana no recordaras nada y no es eso lo que quiero.

El pacto de Cassie.Where stories live. Discover now