Siempre serás mía (Kanato y tú)

Capitulo 5: Instituto y nuevas amistades

Holiss ^^

Dije que iba a actualizar pronto y aquí estoy :D

Ya casi son 1.000 leídos, de verdad muchas gracias por todo ^^

Aquí esta el capítulo 5!

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Narra Tn:

Instituto? Pero... tan tarde?- dije.

Miré el reloj; eran las siete y media de la noche.

Kanato-kun me miró irritado, se notaba que no quería darme explicaciones:

Es un instituto nocturno. Hasta ahora siempre estabas despierta por el día y dormías por la noche, no? Pero date cuenta que los Sakamakis somos vampiros, y deberás adaptarte a nuestro estilo de vida.-

Dicho esto, me entregó lo que sería mi uniforme: era totalmente negro con algunos detalles blancos y un gran lazo rojo. Debo admitir que me gustó bastante, pero no sabía si podría acostumbrarme a ir a clases por la noche.

El vampiro prosiguió hablando:
Tienes 10 minutos para prepararte; la escuela empieza a las ocho y termina a la una. Encima de tu escritorio tienes un bolso con todos los materiales que te harán falta. Date prisa y ve al salón cuando estés lista.-

Después de aclararme esto, Kanato-kun salió por la puerta, dejándome sola en mi habitación. Rápidamente, empecé a vestirme: me puse el uniforme, luego me coloqué unas medias negras un poco mas arriba de las rodillas y unos zapatos marrones. Peiné mi cabello y lo até en dos coletas a los lados, después tomé mi bolso y corrí hasta el salón. Solo me había demorado siete minutos, asi que no se enfadarían conmigo Cuando llegué a dicho lugar, vi que todos los Sakamakis (y Yui-san) estaban ya reunidos.

Muy bien- comenzó a hablar Reiji-san -todos a la limusina-.

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Estábamos en la limusina de camino al instituto: yo iba junto a una ventana y a mi lado se encontraba Kanato-kun, quien no quería que nadie más se sentase conmigo. Luego vi que enfrente mía se encontraba Yui-san sentada entre Ayato-kun y Laito-kun. El vampiro del sombrero se dedicaba a tocarle la pierna a la chica sin que el pelirrojo se diese cuenta ya que estaba dormido *uy mira, se parece a Shu :3* cosa que incomodaba a la rubia, pero no tenía el valor de decirlo:

Oye Laito-kun, que te crees que estás haciendo???- dije valientemente. No podía soportar que aquel pervertido estuviese acosando a Yui-san.

Laito-kun y Yui-san me miraron sorprendidos, y en ese momento Ayato-kun se despertó, y al darse cuenta de lo que estaba haciendo su hermano empezó una discusión entre ellos, lo que provocó que al final el pelirrojo abrazara a su novia y le dijera a Laito-kun que como volviese a tocarla estaba muerto.

Yui-san me miró algo sonrojada, con una sonrisa de agradecimiento en sus labios, a lo que yo también le sonreí. Luego fijé mi vista al vampiro de ojos morados, quien me miraba algo molesto, pero luego suspiró y me dijo:

No deberías meterte en problemas, Tn.-

Yo me quedé callada; sabía que tenía razón, pero no quería que algo malo le pasara a la rubia.