Killer 2.0

21| PISTA 3: la última conversación

29 de junio del 2050
Hora: 5:59 p.m

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Blue Lazer

Mis ojos se abren tanto que temo que salgan de su lugar.

Al oír la voz de mi mejor amigo, es como si algo dentro de mí volviera a recobrar vida. Él nos mira fijamente, acto seguido, se quita la bandana dejando ver su pálido y temeroso rostro, que siempre causa terror en las personas cuando en realidad es todo lo contrario a eso.

Suelto todo el aire que tenia retenido en mis pulmones, en serio me llevé el susto de mi vida.

Sin embargo, tanto Astrid como los demás lo miran con desconfianza __excepto Yosh__ quien nos dedica esa mirada brillante que te dice lo siento en todos los idiomas.

__Un paso más y te dejo inconsciente __amenaza Astrid, provocando que Mid sonría irónicamente.

Sus pasos causados por sus botas negras resuenan en el piso de madera a medida en que da un paso, y otro, y otro, hasta detenerse justo enfrente suyo. El silencio es sustituido por la brisa fresca del viento frío chocando contra nuestros rostros haciendo un contraste que provoca que se me erice todo el vello del cuerpo.

Al notar que todos lo miramos con expresiones asustadas, aparta levemente su rostro del de mi hermana. Y es ahí cuando siento un montón de sensaciones diferentes cuando esos ojos oscuros se posan en mí; y lo que más me impacta es la manera en cómo lo hace: con dolor y... algo más, ¿pena? No tengo ni la más mínima idea.

__El que se va a quedar inconsciente es otro __dice respondiendo a la pregunta de Astrid sin apartar sus oscuros de los míos.

Mi corazón se detiene en un abrir a la par en que siento unas fuertes manos tapandome la boca y la nariz, no logra hacerme daño y de repente, todo pasa muy rápido. Ni siquiera me di cuenta de que alguien estaba detrás mío. Astrid se voltea hacia mi y, cuando tiene la intención de dirigirse en mi dirección, Mid la toma del brazo bruscamente y saca de sus bolsillos un pequeño frasco que rocía en su cara, provocando que esta caiga al suelo pero no completamente ya que la él sostiene.

Yoshua toma rápidamente a Owen y hace lo mismo con ella y Hendrik.

Mis ojos no pueden creer lo que ven.

Trato de forcejear con quien sea que me esté cortando la respiración, le doy una patada en la entrepierna y este se suelta de mi. Justo cuando hago un ademán de correr, una mano fría y grande sostiene mi muñeca y no necesito voltear para saber de quien se trata.

Lo miro con dolor, porque aunque confíe plenamente en él, mi cabeza se vuelve un desastre ante tales actos que está realizando. Me hace un gesto para que mantenga la calma y con una suavidad impresionante me dirige hacia las escaleras para bajar del porche.

Mi corazón late con tanta fuerza en estos momentos que soy incapaz de hacer algo coherente como golpearlo y escapar. Sé que no nos harán daño. Re reojo veo cómo Yoshua carga en sus hombros a Owen y Hendrik como si fueran un costal de papas, y un hombre todo de negro que ya había visto (no tengo idea de en donde) toma a Astrid y la carga.

Tranquila, Blue __me digo a mí misma __son solo Mid y Yoshua con un ejército de matones. No te harán daño.

Retengo el aire en mis pulmones y aprieto los puños con tanta fuerza que los nudillos se me quedan blancos. Mi respiración se entrecorta cuando Mid me dirige hacia uno de los autos tamaño casa y me abre la puerta invitándome a entrar.