Misión Killer 2.0

Epílogo

Narrado en tercera persona

__Mid, debes calmarte __le dice Astrid, mirandolo con preocupación mientras el susodicho hace todo lo posible por no entrar en desesperación __Perder el control no es la solución.

Él la mira, con los ojos llameantes de furia advirtiéndole con la mirada para que no diga nada. Mid se ajusta los guantes de cuero negro mientras, al mismo tiempo, mira fijamente el francotirador en el suelo y el desastre que hubo en la masacre de hace unas horas. Se incorpora del lugar en el que ha estado su cuerpo enarnecido y toma una de sus mochilas, mirando fijamente un punto en específico que le llama mucho la atención. Está muy desesperado por saber en donde se han llevado a Blue, Hendrik a la niña esa.

Su mandíbula está tan tensa que por un momento piensa que se va a desprender de su cavidad. Astrid lo sigue en cuanto hace el ademán de abrir la puerta, recorriendo los pasillos del pequeño bunker en busca de los demás, quienes se encuentran murmurando cosas incoherentes en uno de los pasillos. Yoshua se percata de la presencia del pelinegro, quien los ignora completamente mientras su mente se sumerge en sus pensamientos.

__¡Mid, ven aquí rápido! __Owen lo llama con esa típica voz chillona causando que Mid ponga una mueca pero de igual forma se acerca, quedando su estatura impotente mirando desde arriba a los demás.

__¿Qué coño hacen aquí tan tranquilos? ¡Deberían de estar haciendo yo que sé pero se trata de nuestros amigos, joder! __se exaspera al notar que los chicos solo estaban hablando entre ellos.

__Antes de que entres en cortocircuito, déjame decirte que Yoshua ha encontrado algo __Owen le muestra el collar rastreador en su cuello con una amplia sonrisa.

Mid enarca su ceja, curioso pero con los nervios de punta. De todas maneras, se sienta en medio del círculo, no podia quedarse sin hacer nada.

__¿Te acuerdas des rastreador que le había puesto? __inquiere el castaño y Mid asiente, confundido __La niña esa, Ari, tiene un igual.

El pelinegro se tensa de pies a cabeza, mirando incrédulo a su amigo como si le hubiera salido otra cabeza. Y es que no se había percatado mucho en analizar de pies a cabeza a la niña Kozlov, no le parecía interesante el hecho de hacerlo. Pero una cosa muy diferente es que haya tenido un rastreador todo este tiempo. Mid se da una bofetada mental por no haberse asegurado de ellos antes de aceptar ayudarla. Debía tener más cuidado la próxima.

__¿Un rastreador? ¿En donde? __se oye a sí mismo preguntar, causando que Owen suerte una risa incrédula.

__Creí que te había dado cuenta. Pero podremos rastrearlas con eso. Obviamente ya sabemos a donde se las llevarán, pero eso nos mantendrá tranquilos hasta que vayamos a por los tres.

Los dos lo miran con una amplia sonrisa en sus labios a excepción de la peliblanca, quien se encuentra en su propio mundo y de repente, niega con la cabeza un par de veces asegurando que algo no andaba bien.

__¿Qué sucede, Astrid? __inquiere Owen, mirandola con el ceño fruncido.

__La niña dijo que su hermano la había dejado arriba del árbol. Si tiene ese rastreador, es para localizarla en cuanto pueda.

¡Maldita sea!

Mid se exaspera y se levanta de su sitio como loco, tratando de controlar las ganas asesinas de mandar todo a la mierda e irse de una vez oír todas a buscar a los chicos. Pero eso sería alterar el protocolo y no podía poner en peligro las vidas de sus amigos.

__No sabemos quien es ese chico __continúa diciendo Astrid causando que Yoshua se tense __Puede ser también una trampa, o aún peor, un plan muy bien diseñado.