-𝟶𝟶𝟽-

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-𝙈𝙚𝙧𝙚𝙙𝙞𝙩𝙝 𝙂𝙧𝙚𝙮 -

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-𝙈𝙚𝙧𝙚𝙙𝙞𝙩𝙝 𝙂𝙧𝙚𝙮 -


Vivir con una adolescente que a veces olvidaba era una adolescente era una cosa bastante interesante, comenzando por el hecho de que a veces olvidaban estaba ahí y rompían una de las reglas de los gran "no" de Derek, como era maldecir frente a ella

¿Cómo iban a saber que realmente Madison iba a repetirlas frente a Sloan, Bailey y Derek?, esperaban sinceramente no fuera a repetirla en el momento más aleatorio de una cirugía

Tenían demasiadas reglas como para ser un dolor de cabeza solo pensarlas, considerando seriamente Derek veía a esa chica como si fuera una niña de cinco años que no sabía atarse las agujetas y necesitaba sujetaran su mano para cruzar la calle, porque a veces sentía era ridículo lo sobreprotector que a veces era su marido. Aunque hubieron reglas que no fueron tan ridículas, como la regla de no beber en casa cuando ella estuviera ahí, también la regla de mantener puertas cerradas cuando se duchaban o se cambiaban, descubriendo demasiado rápido que Madison Lowell no conocía el concepto de tocar puertas antes de entrar porque era hija única y no se adaptaba a que había más personas viviendo en la casa con ella

Igualmente no era tan malo tenerla ahí, a veces hasta olvidaban estaba ahí porque era muy callada y prefería estar en su habitación, rara vez podían encontrarla en la sala y, más allá de un par de veces que se la topó en la madrugada por no poder dormir, realmente casi no la veían en casa

Desafortunadamente, muchas de esas veces no fueron muy favorables

—¿En qué piensas? —

Una risa se le escapó cuando sintió el susurro contra su estómago, viendo a su marido subir lentamente para verla

—Nada —negó suavemente—Continua —le empujó la cabeza nuevamente hacia abajo

Recibió una risa y una sonrisa a cambio, haciéndola dejar escapar el aire cuando lo sintió seguir con su trabajo anterior, aferrando una mano a la almohada bajo su cabeza y la otra en su perfecto cabello que ya no parecía tan perfecto después de que sus manos se aferraran a este

Era un gran cirujano, pero en realidad era asombroso en la cama

Sintió el tirón en su vientre que la hizo aferrar un poco más su cabello, agradeciendo comprendiera el mensaje porque hizo esa cosa que la obligó a morderse los labios para no gemir en voz alta, sintiendo el hormigueo que subía por sus piernas

Solo un poco más, solo necesitaba un poco más

—Derek, ¿Le podrías decir a Lexie que... ¡Mierda! —

Ambos saltaron asustados apenas escucharon la voz, apresurándose por instinto a tratar de cubrirse antes de ver a la puerta donde se encontraron justamente a la adolescente con la mano sobre sus ojos, con un libro a sus pies y la cara de un brillante rojo

Little Lowell | 𝙍𝙚𝙚𝙨𝙘𝙧𝙞𝙩𝙖 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora