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Arelin se despertó inmediatamente.

"¿Tiene algún dolor en alguna parte?"

Pensé que era natural que sintiera dolor ya que había estado acostada durante medio año.

"No duele..."

Areline inclinó la cabeza y miró fijamente al vacío.

Mehen también miró para ver qué había en el aire, pero no había nada visible en los ojos de Mehen.

¿Te despiertas y ves algo en vano? ¿Algún efecto secundario?

Mehen llamó inmediatamente a un equipo médico para examinar el cuerpo de Areline.

"¿Oh...? ¿Por qué estás bien?"

Los médicos que lo atendieron estaban perplejos.

"Qué, esto no puede estar pasando".

La condición física de Areline, que poco a poco había ido empeorando, iba mejorando. Todos se volvieron idiotas y simplemente se rascaron la cabeza ante este evento milagroso.

"Te daré tiempo para decir adiós".

Sólo entonces Mehen comprendió el significado de las palabras del archimago.

"¿Mehen?"

Consideración para pasar la última hora en armonía.

Fuera lo que fuese, el corazón de Mehen se llenó de emoción al sentirse abrumado por el hecho de que Areline lo miraba con ojos claros otra vez.




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La Mansión Halbern se llenó de emoción desde primera hora de la mañana.

"¡La señorita está caminando!"

"¡La señorita habla!"

"¡La señorita está comiendo!"

"¡La dama está respirando!"

"¡Bastardo, si no respiras, morirás!"

Todo, desde caminar, comer, hablar, reír e incluso respirar, era conmovedor.

Todos en el grupo de cuidado infantil sollozaron, incluyéndome a mí, al enfrentar una escena que se habían resignado a no volver a ver nunca más.

Mientras Areline comía, le dio vergüenza ver al grupo de cuidado infantil llorar al verla comer.

"Mehen."

"Sí."

"¿Te da pena que coma?"

Mehen levantó una ceja.

"¿Quién se atrevería a hacer algo tan tonto?"

"Si no, ¿por qué diablos está llorando el grupo de cuidado infantil?" 

La mirada de Mehen, que se había centrado únicamente en Areline, miró a su alrededor por primera vez.

Mehen, quien descubrió que el grupo de cuidado infantil estaba siendo regañado, dejó escapar un suspiro lleno de fatiga y lo descartó brevemente.

"Ignora a esos idiotas".

"Mmm..."

"Deberías comer más."

El protagonista está obsesionado con mi salud. PARTE 1Where stories live. Discover now