🏄🏽♀️ˑ ִֶ 𓂃 𝓢𝚄𝚁𝙵 𝚃𝙸𝙼𝙴. ﹅ ୧ ‧₊˚
you're in the wind, i'm in the water.
nobody's son, nobody's daugther.
࿓ marlon sousa x fem!oc.
⠀ written by vamskull ⋆ isu.
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ᘡ ۫ 𖨂 𓈒 🦑 ۟ ៹ 𓂂
Bodhi muy entusiasmada la había invitado a practicar con ella a una playa cercana, pero nunca le había informado que iría el tan odioso Marlon. Alguien que Mahlia prefería evitar luego de como se comportaba, no solo con ella, sino que con Ari también.
Luego de que Gibson le haya dicho que él tenía la culpa de todo, las preguntas la invadieron aún más a Lia. Porque nunca llego a aclararle del todo que había sucedido, pero era mejor no agobiarlo con una situación que tuvo que haber sido dolorosa. Prefería respetar su espacio y tiempo, una vez que él se sienta listo y seguro le contaría realmente cuál era el problema.
—¡Cielos! Hoy está genial, chicos. —dijo Prawnie con una sonrisa.
Al finalmente agarrar su tabla de surf, logró ver a un rayo de luz ante toda esa situación. Ari llegaba con su bicicleta, como si todo hubiera sido planeado y llegara a arreglarle la tarde a Lia.
—Hola, Ari. —saludó Mercer al rubio, mientras Costa optó por acercarse a darle un abrazo.
—¿Practicarás con nosotros? —preguntó Mahlia con una sonrisa, al desviar su mirada logró ver cómo Marlon observaba impaciente.
—Rápido, Mahlia, no te esperaremos todo el día. —dijo Sousa, en un intento de sonar carismático y que suceda un milagro al causar una sonrisa el mismo en el rostro de Lia. Algo que le resultó desagradable a Mahlia, no podía entender porque actuaba como si nada luego de tratarla de manera tan grosera.
—Oh. Sí, claro. Nos vemos, Ari. —contestó Costa, sus ojos reflejando extrañamiento al amable comportamiento del brasileño. Al darse la vuelta y comenzar a caminar, Marlon empezó a hacer lo mismo a su lado.
—Eh. Mahlia. Digo, Lia.
—¿Sí? ¿Pasa algo?
—Lo siento por cómo te he tratado todo este tiempo. —confesó Sousa mientras Costa se agachaba para abrochar su tabla de surf, esta era naranja y muy especial para ella.
Su padre la había hecho especialmente para su hija. El día que llegó a Brasil fue como un abrazo al alma, eso le daba a entender que a pesar de estar lejos geográficamente, él siempre estaría a un lado suyo en sus peores momentos.
—¿Bueno? —respondió Mahlia indiferente levantándose de la arena, aunque apreciaba las disculpas, todavía estaba ofendida por una situación que no tenía ni siquiera el contexto completo.
