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Se encontraba acostado en su cama mientras veía fijamente el techo, su pecho subía y bajaba lentamente tratando de relajarse, su mirada desorbitada se daba a destacar en su rostro, algo no estaba bien.

—"Vamos Sisu son las 6am y no has dormido nada, esto es el colmo" — Pensó antes de gruñir y empezar a patear en la cama cuál niño chiquito —

Había algo. Algo que lo inquietaba y que no lo dejaba en paz, aquella presión en el pecho le quitaba el aire y hacia a su corazón latir mas rápido.
Fijo su vista en los pequeños huevos de Pentius que estaban durmiendo en una cama a parte en su misma habitación, tuvo que hacer eso ya que sentía que en una noche se iba a voltear y mataria a uno de ellos.

— Esto me está matando... Mi mente está destrozada.... —

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—Anda chiquito esto será rápido, hay que aprovechar que Lute está dormida si — Hablo una voz ronca—

Se encontraba acorralado en los pasillos del templo de los exterminadores, con aquel asqueroso hombre deslizando sus manos por sus muslos, moviendo levemente las tela de la licra que usaba.

—No, por favor hoy no Adán, te lo suplico .... — Chillo entre murmullos —

¿Que estaba pagando?

— Cállate,soy el puto Adán, el primer hombre ¿Si captas? Nadie rechaza estar con el don vergotas.—

No recuerda más de esa noche que el dolor insoportable de su cuerpo en la mañana, aunque no le era de extrañar...

No era la primera vez que le pasaba...

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— ... Sniff ... — Sollozo un poco mientras se cubría la cara, estaba al borde del colapso—

Necesitaba aire fresco. Se levantó de la cama arrastrando los pies por el suelo hasta llegar al vestidor, ahí agarro una bata para cubrir su cuerpo  para después salir de la habitación, metió sus manos dentro de la bata dándose cuenta de que ahi se encontraba el pequeño patito de goma que le habia regalado el rey del infierno cuando llego,camino por los pasillos tratando de huir de sus pensamientos, llevaba tiempo estando bien, sintiendose libre... Pero aquellas voces volvían de nuevo a atormentarlo.

¿Enserio crees que tienes lo necesario?

Seguramente solamente eres un pasatiempo, es el rey del infierno, un manipulador, un ser de orgullo y codicia que simplemente usa a las almas para si beneficio.

Apretó fuertemente aquel pato de goma mientras lo hacía chillar una y otra vez, su cordura iba desapareciendo lentamente.

Solo eres otra presa...

— Al parecer nuestro joven angel planea volver al lugar de dónde provino — se escuchó la voz con estática —

—¡¿Ah?! —

Salió de su trance notando que que estaba al borde de uno de los balcones principales del hotel y lo único que estaba evitando su caida eran unos largos tentáculos negros que lo sostenían de la cintura.

Había pasado otra vez, casi volvía a cometer aquella estupidez por culpa de esas malditas voces....

—¡Suéltame!— Estaba en un punto de quiebre, extremadamente sensible, no quería que lo tocará nada ni nadie.—

El Pecado Del Amor Lucifer X Male! Reader Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt