One-shots [Rayllum S4-S5]

2. All too well (It was rare, I was there, I remember it all too well)

Esa mañana se quedaría grabada en su mente con fuego, no habría nada que pudiera hacer olvidar esa mañana de cumpleaños, mientras sujetaba su carta como único regalo que recibiría de ella. se le hizo imposible preguntarse si es que a caso se había perdido en la comunicación que tenían ¿que parte de "iremos juntos" no había llegado a puerto, que parte se había quedado perdida y naufragando en el mar? ¿Había sido demasiado pedirle eso? ¿Acaso ir juntos en si era demasiao? Las dudas asaltaron su cabeza, habían llegado y se habían puesto a saltar una tras otra, como si de un juego de comba se tartase mientras sentía como su mundo caía en la penumbra ante el abandono de la joven elfa que había robado su corazón y se lo había llevado en mitad de la noche, con solo la luna de testigo de tal robo cruel.

Con Rayla ahora entre sus brazos mientras esta lloraba y él la consolaba con palabras tranquilas y susurros que hacia años pensaba que jamás le volveria a decir, se preguntó, analizando la situación ¿cómo habian pasado a esto? Lo que en su momento, él como artista, había pensado que su relación sería la obra maestra más hermosa que habían podido tener y construir juntos habia llegado a destruirse por completo. La abrazo más fuerte ante esa reflexión, porque a pesar de que lo suyo pudiera estar cayéndose a pedazos la tenía a ella, que estaba envuelta en sus brazos y era algo que hace años nunca pensó que pasaría.

Cuando los sollozos de la elfa censaron y el silencio los arropó, Rayla confesó lo que tanto tiempo había guardado.

—Corrí asustada. —Susurró casi inaudible, pero lo suficientemente para que Callum la oyera y sus musculos se tensaran ante sus palabras. —La noche que me fui, hui, tenia miedo de lo que te pudiera pasar si venías conmigo, si te llegará a pasar algo, yo...oh Callum, nunca podría perdonarnelo, tenía que irme, Ezran te necesitaba, y yo no podía parar de pensar en si mis pesadillas se volvieran realidad y tú...—Se le quebró la voz, siendo incapaz de continuar, al fin y acabo ella todavía lo recordaba todo demasiado bien.

Callum escucho sus palabras, como si fueran un llamamiento para romperlo otra vez después de todos esos años, para romperlo como la silenciosa promesa que ambos se prometieron bajo el manto de la noche hace 3 años.

Mientras aún se abrazaban, viendose incapaz de soltarla, sintió la presencia de aquella carta arrugada debido a las vecs que la había tenido entre sus manos, que ella le había escrito y que ahora se encontraba a unos metros de ellos guardada en un cajón. Por que con esa carta lo recordaba todo, Callum todavía lo recordaba todo demasiado bien. Pero eso solo sirvio para abrazarla más fuerte, como si no quisiera que desapareciera o desvaneciera y se escurriese entre sus dedos.

Se separaron del abrazo, después de un tiempo, pero Callum no soltó las manos de Rayla ni siquiera cuando la guió a sentarse en el sofá que tenía en su estudió, y tras un largo silencio, el recitó lo que hacía tiempo alguien le había dicho:

—Dicen que cuando algo termina viene algo mejor. —Dijo con la voz en un hilo, demasiado rota y demasiado baja para ser un tono normal o reconfortante. —Pero yo estuve durante un infierno de dudas y dolor durante estos tres años por solo la idea de que te había perdido Rayla, solo la idea de pensar que no te volvería a ver me hizo querer morirme porque no le encontraba sentido a nada sin ti, incluso aunque me obligase a seguir a delante, a continuar, a asistir a todas esa fiestas, siempre acababa llorando por solo la idea de que tú no estuvieras ahí o que nunca volvieras y no poder vivir contigo esas experincias, sin saber si volvería a ver tus ojos u oír tus bromas y sarcasmo, después de un tiempo entendí por qué te fuiste Rayla, pero eso no evitaba que me siguiera doliendo.