𝐂ᴴᴬᴾᵀᴱᴿ ᴺᴵᴺᴱᵀᴱᴱᴺ

86 11 1
                                    

— ¿Ahora tienes miedo de acercarte?

Con lágrimas en los ojos, JiMin observó el techo lleno de flores de su habitación y con las manos en el pecho sintió aquel terrible silencio en donde su respiración desvanecida lograba escucharse junto a los latidos de su triste corazón hecho leña lista para encender una fogata. Y ante la lejanía de su papá, él solamente se echó a reír de la forma más amarga y vacía posible, se echó a reír porque dolía mucho como para seguir llorando por algo que simplemente ya no podía cambiar.

— Me tienes asco, ¿cierto?

— No... Tengo miedo de seguir rompiéndote a pedazos que luego no podré unir.

— Me dolió, ¿sabes? Pero tuve que fingir que era fuerte por proteger a mis hermanos — Susurró — ¿No es lo que tú hiciste muchas veces por tu hermano?

Desde aquél rincón de esa habitación iluminada tan solo por el brillo de la luna, YajaTzael bajó la vista hacia el piso y asintió a su pregunta, porque por su gemelo hizo muchas cosas de las que nunca se iba a arrepentir, pero como padre, le dolía saber que sus hijos han sufrido más en sus manos que en la de las ajenas. Entendía que todo eso era su culpa solamente y que ha hecho de sus hijos a personas asustadizas y sumisas por el miedo que él mismo les había metido con sus castigos y sanciones.

— Lo siento.

— ¿Por qué?

— Solo lo siento y ya... y prometo que cuando mate a ese tipo... los dejaré libre.

Sin tener el coraje de ofrecer verdaderas disculpas por absolutamente todo, tomó la decisión de dejar descansar a JiMin e irse a un lugar lejano en donde pudiera desquitar todas las emociones que lo estaban carcomiendo vivo. Y porque sabía que unas disculpas no iban a reparar nada es que abrió la puerta con intención de salir, sin embargo, no creyó que JiMin quisiera que se quedara como para haberlo sujetado de la mano e impedido que saliera por esa puerta a la que no volvería a abrir.

— ¿Por qué huyes ahora? ¿A qué le tienes miedo?

— A esto, le tengo miedo a lo que pueda pasarles por mi culpa. JiMin, tú una vez me dijiste que el karma golpea duro.

— ¿Le tienes miedo a eso?

— No, le tengo miedo a lo que les pueda pasar por mi culpa. ¿Crees que no me duele esto? ¿Crees que no me duele saber que he hecho las cosas mal? — Cuestionó — No tengo miedo a pagar mis errores, tengo miedo de que ustedes sean los sacos de boxeo que el karma quiera usar para golpearme a mí.

— Papá...

— Escúchame. JiMin, escúchame. Necesito que se vayan lejos de mí para, cuando esto termine, no sea su final — Susurró — Y si ese tipo quiere hacerles daño, entonces tendrá que matarme para lograrlo.

Asustado atrapó entre sus manos el rostro lastimado de JiMin y le hizo saber de una u otra forma que no iba a permitir que Min YoonGi les hiciera más daño de lo que él les había hecho, y que si para reparar lo dañado debía dejarlos ir para siempre, entonces tendría que afrontar la triste realidad de verlos partir sin él. Sabía que nada de eso podría reparar lo que ya se había hecho polvo, pero al menos podría evitar que fueran lastimados por un psicópata.

— ¿Entonces me sigues amando a pesar de que fui abusado?

— Te amo a pesar de que saliste enano.

JiMin soltó una risa con un doloroso nudo en la garganta y llorando con temor se fue a abrazarlo a pesar de todos los problemas y errores, porque lo amaba incluso si fue su más grande verdugo. Lo amaba incluso sabiendo que no tenían ese lazo rojo que debía unirlos, pero que para él nunca había sido verdaderamente importante cuando lo amaba así lo haya dañado tanto y lo amaba porque sabía que también era amado, que lo era con todo lo que eso podía conllevar.

𝐈ᴺᴴᵁᴹᴬᴺ. (ᴛʀɪʟʟɪᴢᴏs ᴘᴀʀᴋ x ʏᴏᴏɴɢɪ)Where stories live. Discover now