Amor ajeno

944 62 0
                                    

Puedes irte y no importa,
pues te quedas conmigo,
como queda un perfume
donde había una flor.

Tu sabes que te quiero, pero no te lo digo; y yo se que eres mío, sin ser mío tu amor.
La vida nos acerca y a la vez nos separa,
como el día y la noche en el amanecer.

Mi corazón sediento ansía tu agua,
pero es un agua ajena que no debo beber...
Por eso puedes irte, porque, aunque no te sigo,
nunca te vas del todo, como una cicatriz.

Tu amor es como un río,
que parece más hondo inexplicablemente,
cuando el agua se va.

Y yo estoy en la orilla,
pero mirando al fondo,
pues tu amor y la muerte tienen un más allá.
Para un deseo así, toda la vida es poca.

Pensando en ti, está noche,
yo besaré otra boca;
y tu estarás con otra
pero pensando en mi.

Epifanías de MedianocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora