Bienvenido al inicio de una serie de One Shots sobre nuestro querido Enzo Vogrincic.
¿Deseas alguna historia en específico? Puedes pedirla respetuosamente en la caja de los comentarios.
Advierto que tiene lenguaje explícito sexual, si no te gusta te invito a dejar de leer!!
Si vienes de tiktok pon tu user en los comentarios y te mandaré un saludo y una dedicatoria en el siguiente capítulo! de igual forma les mando un beso.
¡¡CAPÍTULO EDITADO!!
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Desde mis sábanas podía sentir la vibración del aparato a mi derecha, la alarma de mi celular no dejaba de sonar desde hace unos minutos. Sabía que tenía que levantarme pero deseaba quedarme unos cinco minutos más en la cama, esos cinco minutos se convirtieron en media hora y me di cuenta tarde. El cansancio me había ganado nuevamente.
Me levanté de forma casi inmediata y me metí a la ducha, podía sentir el nerviosismo ya en mi cuerpo, un cosquilleo en todo mi cuerpo. llegaría tarde a la primera sesión de hoy, tendría que maquillar nuevamente aquel rostro tan perfecto, cada parte de sus facciones me parecía fantástica, dejé de fantasear cuando el agua se estaba enfriando, al salir cepille mis dientes rápidamente y me perfume un poco, un olor a vainilla brotaba de mi.
Con mi uniforme ya puesto y con media hora para llegar al trabajo salí de manera disparada de mi casa, corría con las maletas esperando algún taxi.
Milagrosamente llegué con 5 minutos de sobra, vi a los actores alistándose en sus asientos para que los maquilláramos y en lo que eso sucedía yo saludaba a mis compañeras. Pude ver aquel rostro que tanto deseaba acercarse a mis espaldas, trataba de juntar mis labios para no sonreír.
—Mia vení un segundo. De nuevo llegas justo a la hora. Procura llegar temprano. Sabes que me gusta tener tiempo de sobra luego del maquillaje.
Conocía perfectamente esa voz, se me acercaba por la espalda mientras apoyaba una de sus manos en uno de mis hombros y agachaba su cabeza, asegurándose de que solo yo lo escuchara.
Casi de manera descarada olía mi perfume mientras susurraba en mi oído.
—Hoy hueles especialmente dulce. —una sonrisa se plasmaba en su rostro.
Quería darme la vuelta y darle un beso, pero tenía que ser "profesional". Algo que no existía cuando estábamos solos.
A sí que preparé mi discurso y dije;
—Buenos días, Enzo. ¿Queres empezar ya con el maquillaje?—Dije quitándomelo de encima, sentía que no resistiría teniéndolo tan cerca.
Mis mejillas se tornaban de un tono carmesí cuando actuaba de esa forma tan casual conmigo. Acercándose y pegándose a mi, como si fuéramos los únicos en esa habitación.
