#1 - Uɴ ʙᴇsᴏ ᴅᴇ ʙᴜᴇɴᴀs ɴᴏᴄʜᴇs

524 32 4
                                    

Johnny y Kenshi se encontraban durmiendo en la misma cama, sus respiraciones eran lentas y tranquilas, capaces de dormir el uno con el otro.

En medio de la noche el estadounidense se despierta medio dormido, había tenido un sueño loco haciéndolo despertar, llevó su mano a su frente y giro su cabeza para encontrarse con el rostro dormido del japonés, que se iluminaba con la luz de la luna asomándose por las cortinas de la ventana . Se veía muy tranquilo dormido, pareciera un belleza enfrente sus ojos.

Sin mentir, Kenshi era el hombre más hermoso y perfecto que pudieron ver sus ojos y corazón, era un hombre del cual no se cansaría del amor que le da, las sonrisas, las caricias. Nunca se aburriría de él. Era la razón por la que el no se sometía a sus pensamientos negativos, con sólo su presencia con el podría calmarlo y hacerlo una persona feliz.

Cage se acercó poco a poco hacia takahashi, sus respiraciones se mezclaron y pronto Kenshi despertó ante él movimiento de cercanía de su pareja.

—¿Johnny? —Preguntó medio confundido y en susurro, al no tener a sentó consigo no sabía si estaba despierto.

—Estoy aquí, Ken —Habló bajo mientras se acercaba más al nombrado, sus frentes se juntaron haciendo entender que estaban juntos.

—¿Qué sucede? —Preguntó nuevamente, en el acto tomo la mano de Cage y entrelazaron sus dedos,  quería tener más contacto con su amado actor.

El actor coloco su mano libre en la mejilla del espadachín que no estaba contra la almohada, acariciaba con su pulgar la mejilla caliente por el contacto físico repentinamente. Kenshi sonrió hacia Johnny con dulzura, le encantaba como lo acariciaba, sus caricias eran suaves y lentas.

—Quiero un beso —Confesó Cage en susurro escuchando la baja carcajada de Kenshi— Por favor —.

Kenshi sin decir alguna palabra, acortó los pocos centímetros juntando sus labios con los de Johnny, creando un tierno beso entre los dos. Sus labios se movían al compás del otro, el exquisito sabor dulce de sus labios no los dejaban separarse. No querían.

Pasaron los segundos y comenzaron a separarse lentamente, los dos hombres estaban con una sonrisa dedicada al otro, sus mejillas ardían con amor, y sin ninguna palabra más se abrazaron listos para volver a dormir en lo queda de la noche.

Aquel contacto dulce de labios fue su beso de buenas noches.

❀𝙱𝚢 Soy_kichaa

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 → 𝐽𝑜ℎ𝑛𝑠ℎ𝑖Where stories live. Discover now