La intrusa de la unión [The Fruit Basquet x OC]

Capítulo 29

--- (tenso) N-no... no he logrado enfrentarla...

--- Kyo (separándose) Tú nunca me perderás, siempre estaré aquí para ti, pero... tú mejor que nadie lo entiende, el saber que no siempre podrás despedirte.

"Honda Kyoko, ¡Un gusto!"

"Himitsu y Kyo siempre deben estar unidos, así mamá estará feliz"

"Estaremos bien, Kyo-nii-chan"

Kyo: (sorprendido sintió como la chica secaba sus lágrimas con cuidado) ~¿En qué momento... creciste tanto como para ser quien tomara mi mano y me guiara?~

--- ¿No sería mejor que no volvieras a cometer el mismo error otra vez, y le digas a Tohru lo que realmente sientes por ella?

Kyo: (sonrió con tristeza, y abrazándola ocultó su mirada) ~¿En qué momento... te volviste alguien tan impresionante?~ (dolido) ¿Por qué me dices esto?

--- Porque te vi rechazarla, y sé... que si te vas, yo también te pierdo a ti, y no quiero eso.

--- Lo lamento... Himitsu... (musitó con llanto) Lo siento por hacerte sufrir tanto, por preocuparte tanto, por no ser el hermano mayor que mereces.

Himitsu: ~Sus emociones, su corazón, algo en su interior se siente como una cuerda que pronto se va a romper. Quizás, es tiempo de que deba perdonarse a sí mismo otra vez, y simplemente vivir sin preocuparse por nada más.~ (correspondiendo sonrió) Yo soy afortunada, de tenerte como mi hermano mayor, Kyo-nii-chan.

"Preferiría morir si Kyo-nii-chan no estuviera"

--- (asombrado sonrió con tristeza) Gracias por eso.

(...)

--- ¿Estás segura de que no quieres que pida un taxi?

--- Ya puedo caminar bien, Yuki. (animada) Ya me siento mejor.

--- (tomando su mano le sonrió) No te esfuerces, ¿sí?

--- (sonrojada apartó su mirada con una sonrisa) Está bien.

El sol comenzaba a ceder su posición en el cielo cuando Yuki y Himitsu salieron juntos del hospital. En cuanto Kyo logró hablar con Himitsu, este se motivó en ir a buscarla para arreglar las cosas lo antes posible, lo cual la llenó de alivio.

Los doctores llegaron y le dieron el alta, por lo que Yuki fue a buscarla sin problemas. La tarde estaba envuelta en una luz cálida y dorada, y el aire fresco soplaba suavemente, llevando consigo la promesa de un nuevo comienzo.

Caminaron en silencio, disfrutando de la serenidad que rodeaba el lugar. Sus manos entrelazadas mientras se dejaban llevar por el momento gentil que era un respiro para tantas sorpresas. Sin embargo, no sabían que aún faltaba una sorpresa más.

--- Himitsu, ¿qué sucede?

--- ¿Eh?

--- (se detuvo frente a ella) Estás llorando.