Sol e Lua

☀️ 𝐑𝐞𝐣𝐞𝐢çã𝐨☀️

Ahora mismo Luffy se encontraba haciendo los preparativos para un segundo intento, sólo que ahora con ayuda de Zoro, sus demás amigos se negaron y le dijeron que se rindiera con eso.

-Estoy nervioso Zoro- dijo Luffy mientras se sentaba viendo nervioso al de aretes.

-Ah vamos casanova, tal vez esa vez se sintió presionado por vernos a todos ahí- habló mientras se sentaba al lado del otro.

-Y hablando de casanovas ¿Qué sucedió con el amorio?- preguntó curioso Luffy viendo al peliverde.

-Por ahora estoy fuera de servicio, las clases de Kento me absorben- hablo desviando la mirada.

-Tu que hubieras hecho en mi situación Zoro, ¿nunca has llegado a ese momento de amar mucho a alguien y pedirle casarse contigo?- miro con curiosidad sobresaltando al otro.

-Eso no te interesa enano- evadió la pregunta mientras cerraba los ojos.

-Vamooos, dilo te conozco desde niños, debo saber quién fue, debe haber alguien para que evadas la pregunta ¡Shishishi!- comenzó a molestar.

Luffy se puso de pie y comenzó a picar la mejilla de Zoro causando molestia en el otro.

-Dime y te dejo de molestar Zorooo- habló mientras picaba su mejilla más rápido.

Luffy molestaba y salvaba su dedo debes en cuando de ser mordido.

-Hubo alguien con el que quise casarme, sólo que nunca fuimos a nada ¿Contento?- habló entre dientes mirando enojado al otro.

-Debe ser porque Zoro es un idiota y nunca lo dijo ¡JAJAJAJ! ¡BOBO!- Luffy comenzó a reír para aliviar el ambiente.

El peliverde sólo lo recriminó con la mirada y supiro, Luffy siempre ha sido así, despistado, imprudente, un idiota en pocas palabras pero aún así no niega que es tan especial para él, hasta el punto de ser ese gran amor que no llega nada.

-No olvides que ahora mismo soy el único con el que cuentas con apoyo para esto, ni tus hermanos te siguieron- lo regañó mientras se reía.

Sí, Zoro lo apoyaba, la felicidad de Luffy era la felicidad para Roronoa, no negará que al principio le dolió pero lo comenzó a asimilar.

Law por fin llegó, su corazón latía impaciente ante el encuentro, no negaría que tenía miedo, ese miedo a ser rechazado de nuevo por su gran amor.

Zoro al ver la llegada del otro decidió moverse del lugar, decidió “esconderse”, su corazón se dolía al saber que pronto perdería esa oportunidad de estar al lado de Luffy, pero sabe que fue su culpa, cuando tuvo oportunidades de confesar su amor nunca lo hizo, así que no podía odiar a Trafalgar.

—¡HEY, TORAO!— Luffy salió disparado hacia Law, brinco para abrazarlo y dar un casto beso.

Fue correspondido por el mayor, se sonrieron y se dispusieron a comer, tuvieron esa charla amena bajo la luz de la luna.

—Torao hablemos de algo importante para mí…— habló mientras se ponía al lado del otro.

—¿Sucedió algo malo Luffy-ya?— sus ojos denotan preocupación.

—Para nada, es algo que llevo tiempo pensarlo, sólo que tengo algo de miedo— tragó saliva y se dispuso a hacer su segunda confesión.

Law lo miro fijo, estaba esperando a ver que era lo que guardaba entre sus pensamientos Luffy.

—Sabes… te amo, nada me haría más feliz que estar contigo y dejarte hasta mi último suspiro, a pesar de que me hayas rechazado esa ocasión no he dejado de amarte, esa llama sigue creciendo desde la primera vez que te vi, quiero compartir todos tus logros, fracasos, dolor y todo lo que tenga que ver contigo, ¡TE AMO TANTO!— Gritó, esperando que ese amor intenso fuera transmitido hasta el corazón de Law— ¡Cásate conmigo!… Dame ese honor de amarte hasta mi último latido— finalizó mientras sacaba el pequeño anillo discreto.

El cirujano no sabía que responder, miro el anillo, miro su expresión reflejada en él, demostrando miedo y miro la de Luffy, su mirada, Dios su mirada cargada de amor sincero y ferviente pasión, supo que ya no lo podía seguir lastimando, dejaría de ser ese verdugo y pondría fin.

Su corazón dolía, pero el en su mente se sentía como un egoísta, amaba a Luffy, con todo su corazón, pero alguien tan roto como él no podía ser sanado por alguien tan puro, lo lastimaría y dejaría podrido como él.

Se acercó a Luffy, tomo su rostro con delicadeza, trazo cada uno de sus rasgos faciales, grabando en su mente con sus dedos cada pequeño detalle, mientras lo miraba con esa admiración, dulzura y un dolor oculto en ellos, acerco su rostro, lo besó, depositando ese amor en el pequeño.

Se separaron, el corazón de Luffy latía, sonrió desbordando de esa alegría tan característica de él, pero la respuesta de Law le rompió el alma.

—Luffy-ya, mi cielo, mi mar y amor entero, para con esto ya, sólo te seguirás lastimando…— bajó la mano de Luffy que extendía el anillo y continúo— lo mejor será terminar con esto, has sido una parte de mi corazón y lo mejor será dejarte ir.

Luffy no sabía que responder, sólo lo miro exigiendo una respuesta menos confusa.

—No vuelvas a buscarme Luffy…— besó con delicadeza su lugar y se marchó del lugar.

No miro atrás, su corazón ardía, algo dentro de él rasguñaba, en su mente algo le decía que estaba mal eso, que volviera y arreglará todo, no podía dejar a alguien tan especial como ese pequeño sol, lágrimas salieron de sus ojos pero no se sentía capaz de voltear, sabía que si lo hacia se arrepentiría, lo tomaría entre sus brazos y limpiaría sus lágrimas, pediría perdón hasta cansarse por ver a Luffy tan roto, lo supo porque lo escucho llora. Abrió con cuidado la puerta y salió del lugar, dejando ese amor que no volvería, pero ganando de acompañante el arrepentimiento eterno.

(…)

Público esto después de un arduo día de estudios en preparatoria 🥳.

Palabras: 961

Publicación: 26/01/24

Sin ediciones.

Palabras del escritor: Procuraré actualizar pronto, el semestre acabo, saldré en vacaciones la siguiente semana, por lo cual me relajaré. Y sobre la historia de “tell me” sigo trabajando en el capítulo, tengo una crisis existencial al igual que ando sin ideas.

¡Éxito para todos!