Daemon siempre sintió una atracción por su primo Daerys Velaryon, muy al contrario de Daerys quien está más que profundamente enamorado de su marido Silver Tyrell.
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El día que Daerys Velaryon hizo presencia en King's Landing, Rhaenyra sintió el miedo recorrer cada parte de su ser así mismo también la envidia de ser ignorada por su tío Daemon.
Al principio quizás no lo hubiera tomado como una amenaza hacia su persona si no fuera por el atractivo del hombre, cabello negro como el carbón, ojos dorados como los de un dragón y la piel pálida como la leche.
Todo en Daerys gritaba peligro y Rhaenyra solo quería dar un paso atrás y pedir a su dragona que escupiera fuego al intruso pero con solo ver los ojos fríos del hombre comprendió que no era una opción y lo peor fue cuando Daemon fue ignorado por este mismo al momento que otro hombre de cabellos rojos y ojos platimados hizo presencia con una gran sonrisa en el rostro, presentándose como Silver Tyrell.
Ambos al parecer compartían una historia que los unía más allá de una amistad y en silencio aceptaron la coronación de la única hija de Viserys por más que hubo más de un lord en contra de eso por la llegada del verdadero heredero.
El caos estalló, la mayoría quería ver la sangre de Aemon en el trono y otros pocos que la corona fuese aún nuevo heredero que posiblemente Viserys podría dar con una nueva reina pero Daerys hizo callar las voces molestas con una mirada que prometía una muerte rápida pero doloroso.
Después de eso Daerys y Silver se instalaron en desembarco del rey, hasta una nueva llamada de urgencia de la corte, ambos hombres caminaban con total calma hasta estar en las puertas, sin dar tiempo de que la práctica continuará ingresaron ante la atenta mirada de Rhaenyra.
Viserys se miraba más que incomodo en lo que Daemon sentía una curiosidad invadir su ser y Otto Hightower solo podía decirle adiós a sus planes.
──¿Qué está pasando ahora?── pregunta Daerys segundos después de que nadie dijera nada y más con lo decaída se mira la hija de Otto.
Silver no cree que algo bueno este pasando y con pasos más que apresurados ya está al lado de la niña Hightower que ahora está sollozando en lo que aprieta su vestido azul.
──Lady Alicent, sería capaz de revelarnos lo que ha sucedido en nuestra ausencia── la voz de Tyrell se escucha suave pero detrás de ella se puede sentir la ira.
Alicent no cree ser capaz de mirar al hombre y decir palabra alguna si su padre está viendo en su dirección y eso logra captar Daerys que se une a la joven y tapa todo aquel que quiera intimidar a la joven dama.
──E-el rey....── la joven Hightower quiere ser honesta sin embargo no cree ser capaz de traicionar a su padre.
──Mi hija será esposa de su majestad el rey, su semblante de alegría se debe a ese acontecimiento, no hay manera de que se preocupen por nada── corta cualquier cosa que su hija quiere decir pero Tyrell gruñe en su dirección y mira a la niña.
──No creo que mi acompañante haya pedido su opinión lord mano── ahora es el turno de Daerys callar a Otto quien se muerde la lengua ──La pregunta fue hecha para su hija y es de ella de quien quiero escuchar la respuesta.
Sus palabras son como daga y a pesar de que a Rhaenyra le incomoda el hecho de que su ex amiga se casará con su padre no mira como algo bueno que ambos intrusos hablen de tal manera ante el rey y la futura reina.
──Joven Tyrrell no hay manera de que se altere por un matrimonio arreglado, está decisión lo tome yo al momento que la joven Alicent decidió visitar mis aposentos en las noches.
Daemon se ríe ante eso y Rhaenyra puede sentir la traición aumentar en su corazón por un momento quiere tener la cabeza de su amiga en sus manos por otro lado el resto de Lores se sienten ofendidos y dando una mira de asco a la joven doncella.
Daerys puede ver las lágrimas aumentar en las mejillas de Alicent, es consciente de que el honor de la joven doncella fue quebrado ante las revelaciones imprudentes de Viserys.
──Y eso te da derecho a escogerla como tú esposa, la niña apenas va por sus dieciséis años y crees tener el derecho sobre ella, como tú nuevo trofeo o como tú yegua── Daerys suelta veneno y todo el humor de Daemon desaparece.
──Mi príncipe....── trata de hablar Otto pero es callado de nuevo pero está vez por un golpe del pelirrojo.
──Callate, no lo llames príncipe si eres capaz de vender a tu hija con tal de ver tu sangre en trono── el puño de Silver está en aire ──Alicent deja de ser tu hija desde ahora y pasa a ser una Tyrrel por tu propias imprudencia y todo aquel que trate de mancillar su nuevo honor como lo hizo el rey será quemado por Red.
──También lo sera por Black, no me importa si es el mismo rey o la heredera si escucho alguna palabra salir de esta sala── demanda con su fría voz y cubre a la joven Alicent con su capa para salir de la corte.
Esa fue la última vez que Rhaenyra logro tener una conversación con Alicent y también la segunda cosa que perdió en las manos de Daerys.
Lo que pasa días después es más sorprendente una vez que Daerys organiza su boda con la compañía de la hija de Silver, al parecer ambos amigos esperan el momento de regresar y casarse en los ojos de todos.
Al principio es visto mal porque no es normal ver a dos hombres casarse pero con tener sangre Targaryen y dos dragones de su lado nadie puede decir nada, todos los Lores de los demas reinos llegan y deja regalos para los recién casados.
Daemon no es feliz con eso que no tarda en beber más de una botella de cerveza y saca de la cama a la dulce Rhaenyra, llevándola al burdel dónde la despoja de su virginidad y la toma como su mujer.
Al principio la heredera de Viserys se siente contenta cuando es tomada pero todo se torna gris una vez que su tío gime el hombre de Daerys, pidiendo que regrese a él y lo tome a él como esposo.
De ahí Rhaenyra escapa con lágrimas en los ojos, vuelve al castillo y quiere olvidar lo que pasó y trata de seducir a Ser Criston pero el no está para ella si no Ser Harwin.
Si la hija de Viserys pensó que nadie se enteraría de eso estaba equivocada, al día siguiente todos estaban informados de su escapada y con quién paso la noche, en los ojos del rey se podía ver la decepción y apunto de quitarla como su heredera si no fuera por Daerys, el hombre al parecer había pasado su noche de bodas en el castillo y estaba enterado de todo que interfirio por ella.
Rhaenyra busca compasión en Alicent pero está se niega a verla y esconde su rostro detrás de Silver, el hombre no se encuentra feliz de verla aún así le da una mirada de lastima y apoya la solicitud de su esposo.
──Lo más conveniente que miro a este problema y para que las lenguas guarden silencio es una boda con el hijo de mi media hermana, Laenor Velaryon.
