Ye Fei, el único superviviente del “Programa de Plantación” de la Torre Blanca
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«¿Afiliación anormal?»
Qin Jing no lo entendía por completo.
—¿Qué es eso?
Con los ojos entornados, Ye Fei respondió despreocupadamente:
—En pocas palabras, es una habilidad psíquica que no pertenece al portador.
—¿Quieres decir que... es una privación de tu habilidad psíquica? —Qin Jing frunció el entrecejo.
—Mmm, es algo parecido, pero en mi caso no es una privación, es un “trasplante”.
Ye Fei había sido un profesor, una profesión que el mismo disfrutaba, más o menos se puede decir que era su vocación, y cuando hablaba sobre ciertos puntos de conocimiento, aportaba un poco, inconscientemente, de sermón:
—En 3035, Lin Xianxian fue la primera psíquica conocida en el mundo, después de eso, el laboratorio descubrió en su cuerpo un virus capaz de provocar mutaciones genéticas, denominado α. El virus penetra en el cuerpo humano y altera la secuencia genética, dotando a la persona infectada con habilidades más allá de los límites humanos. Pero la vida de transmisión de α es desconocida, y se desconoce la fuente. Si alguien está hambriento de estas poderosas habilidades, pero no puede infectarse con α, adivina, ¿qué crees que harán?
Los ojos de Qin Jing se desviaron ligeramente.
—¿Encontrar de alguna manera a los infectados?
Ye Fei chasqueó los dedos, indicando que había respondido correctamente.
—Después de que el experimento se pusiera en marcha en secreto, el primer grupo de diez voluntarios fue inyectado con α, extraído de los infectados, pero sus cuerpos fueron incapaces de transportarlo y se quedaron sin el virus en menos de una noche, finalmente los diez murieron y el experimento se suspendió. El experimento se detuvo, pero los corazones codiciosos no lo hicieron, crearon laboratorios subterráneos y utilizaron innumerables métodos, pero no pudieron encontrar la manera de tener éxito.
El tono de su voz era ligero, como si estuviera hablando con Qin Jing de algo trivial.
En ese momento, hizo una pausa y sonrió de repente.
—Adivina qué pasaría si un día encuentran un sujeto experimental que no puede morir.
Aunque no lo dijera, Qin Jing lo adivinó, pero ella estaba más o menos incrédula.
Su expresión era algo complicada
—¿Eres... tú?
Ye Fei asintió con la cabeza.
Apagó el cigarro en el suelo y se giró para levantar la mano y bajarse el cuello de la camisa, revelando una marca roja bajo su clavícula izquiera: “E-01”
—Sujeto de prueba 01, Ye Fei, el único superviviente del “Programa de Plantación” de la Torre Blanca, la habilidad principal es la curación absoluta, el resto... es un problema, así que no lo explicaré —dijo esto con una sonrisa en el rostro y le guiñó un ojo a Qin Jing de forma muy relajada.
