Good Lovers

14

No quería hacerlo, pero sabía que no había muchas más opciones, no podría evitarlo para siempre y tal como esperaba, KyungSoo apenas puso un pie en su oficina, todo el mundo había volteado a mirarlo, porque claramente su escandalo había escalado a niveles impresionantes, pero quería fingir que nada de eso lo afectaba y había terminado por cruzarse en medio de todos como si no le debiera nada a nadie, y era mejor hacerse el fuerte, que esperar la pena de los demás, así que quería fingir que no pasaba nada, lo peor de todo era saber, que todo el mundo ya sabía lo que había pasado y claro, su cara estaba en todo el internet, no solo era un cuernudo, también era un psicópata ante los ojos de todos.

Habían quitado su programa para poner otra cosa, seguir transmitiendo, no hubiera sido bueno, definitivamente no, nadie quería escucharlo en esos momentos, el odio que recibía día a día la estación era impresionante, KyungSoo no era una víctima a la voz de todas las personas que creían tener poder de opinión por estar a salvo detrás de una pantalla, lo llamaban un demente y que por eso, Chanyeol lo engañaba, no sabían nada.

-Pensé que nunca volverías a dar la cara.- dijo JongIn, justamente la persona que no quería ver en ese momento. –Es bueno volver a verte, ha pasado un montón de tiempo.- le dejo su pay en su escritorio y KyungSoo solo suspiro, a su modo, le alegraba que al menos JongIn lo hablará, porque de otro modo, no había manera de sobre llevar todo eso solo. -¿Estás mejor?

-¿Crees que estoy mejor? Me han tachado de casi asesinar al amante de mi esposo, cuando solo le arroje café en la cara, ciertamente no me arrepiento.-

-No creo que haya sido por eso, más bien, creo que fue porque lo hiciste enfrente de un montón de personas, en especial alguien que tenía una cámara para grabarte.- KyungSoo termino suspirando, sabía que había hecho mal, pero no terminaba de entender porque era el único que tenía la culpa, menos cuando Chanyeol incluso se lo decía. -¿Qué harás? Tampoco es que seas del todo inocente.-

-¿Por qué si quiera te importa? Esto es un asunto mío.- dijo KyungSoo, fingiendo que revisaba su guion, iban a transmitir, aunque no sabía cómo iba a terminar eso, seguramente muy mal. –Voy a hacer que mi esposo y yo, vayamos a terapia de pareja, vamos a ir juntos, vamos a salvar este matrimonio.- JongIn no tuvo expresión alguna, quizás ya se lo esperaba y solo estaba mirándolo con, algo parecido a la lastima. -¿Por qué pones esa cara?-

-No puedes hablar enserio, tenía un amante de la escuela de tu hijo, ¿de verdad quieres regresar con él?-

-No conoces a Chanyeol.-

-No necesito conocerlo para saber que tampoco es precisamente alguien brillante.- KyungSoo golpeó la mesa, provocando que todos los miraran, a él y a JongIn. -¿Te vas a enojar por escuchar la verdad?-

-¿Cómo puedes decir eso?- preguntó KyungSoo -¿Cómo puedes decirle eso a tu jefe?-

-No eres mi jefe, mi jefe es el mismo que el tuyo, no estamos en diferente nivel y creo que tenemos antecedentes, ambos sabemos de qué hablo, solo estoy dando mi opinión desde el otro lado, desde el lado de alguien que te está viendo hacer el ridículo, das lastima, no eres así la persona que me gustaba.- KyungSoo estaba apretando los dientes, completamente molesto, pero la tranquilidad de JongIn parecía genuina, en realidad no parecía que fuera a inmutarse por nada, hasta cínico parecía. –KyungSoo, eres más que esto, eres más que las migajas que puedes recoger de un matrimonio destruido, no por alguien más, tú mismo lo arruinaste desde el principio y lo sabes.- Soo se talló la nuca, no quería eso, no quería escuchar nada y por eso mismo, solo se había dado la vuelta para colocarse los audífonos en la cabeza y fingir que leer su guion era mucho mejor que su conversación.

JongIn solo lo miró unos segundos más antes de irse, de todos modos había intentado más de lo que cualquiera hubiera intentado con él, le daba lo mismo ahora, así que ahí terminado yéndose por donde había venido, con la mirada de todos en él como en KyungSoo, que fingió que era otra mañana tranquila en la estación, acomodándose en su asiento, preguntando las cosas de rutina, que le respondían a medias porque ahora todos no sabían cómo tratarlo, era una pesadilla pero de algún modo, KyungSoo sentía que se lo merecía.