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KyungSoo no podía creerlo, cuando abrió sus ojos en medio de la habitación de hotel, terminó levantándose de golpe, su cabeza dolió por toda la luz del sol que entraba por la maldita ventana, que le pareció jodidamente grande para una habitación tan pequeña, ¿qué demonios había hecho anoche? Pero las respuesta vinieron antes de lo que le hubiera gustado, porque al girarse, terminó encontrando a Kim JongIn durmiendo a su lado, desnudo y entonces el dolor de sus caderas, las marcas en su cuerpo y todo, empezó a verse más claro en su cabeza.

-Mierda.- fue lo único que atino a decir y lo único que podría decir a ese punto, porque otra cosa no iba a poder salir de su boca, no en una situación como esa y KyungSoo se golpeó la frente con mucha fuerza una y otra vez, entonces terminó mirando de nuevo a JongIn, cada que lo veía a la cara, podía recordar claramente lo que había pasado, los besos, los toques, era como regresar a mejores momentos de su vida, pero no debería estar teniendo esa vida en esos momentos, no así y cuando encontró su teléfono en la mesa de noche junto con sus pantalones bien doblados, seguramente siendo obra de JongIn, terminó encontrando un montón de mensaje y llamadas de Chanyeol.

Un montón de maldiciones salieron de su boca, como si las hubieras ensayado pero solo podía decir eso, ¿cómo le iba a explicar eso a Chanyeol? Ni siquiera sabía porque demonios lo había hecho, ¿un impulso? ¿Qué Chanyeol y Yeol no habían tenido sexo en mucho tiempo porque todo eso era demasiado raro desde hacía meses? Bueno, aunque pudiera decir eso, en realidad no tenía la justificación, Chanyeol iba a matarlo.

KyungSoo se vistió a toda velocidad y ahora estaba en un dilema, porque no sabía si despertar a JongIn, se preguntó para qué demonios haría eso, quería decir, habían tenido sexo, ahora tendrían una maldita cita, KyungSoo nunca había algo como eso, irónicamente, era lo único que nunca hecho en ese matrimonio.

Si bien, Chanyeol y él habían tenido muchos problemas en esas semanas, eso no era una justificación, KyungSoo terminó haciendo lo que ya había visto como una opción, así que solo se vistió, le dejo algo de dinero a JongIn con una nota, diciendo que había tenido que irse por una urgencia, lo que era una mentira, pero de todos modos ¿qué importaba? Lo dejo ahí y termino saliendo de ahí a toda velocidad, tapándose la cara hasta que subió a un taxi, entonces fue a casa.

La criada de la puerta lo vio sorprendido, seguramente se veía horrible y la resaca los estaban haciendo verse como un indigente, pero no le importo nada de eso, solo la saludo como si fuera la mañana de un fresco día, le pidió unas aspirinas, así como un poco de fruta y se fue a sentar al sofá, mientras se tallaba la cabeza, no podía asimilar ninguna de sus malditas ideas y estaba bastante enojado consigo mismo, con JongIn pero más consigo.

-¿Y mi esposo?- le preguntó a su criada cuando regresó con lo que le pidió.

-Salió a dejar a YeJun y dijo que iría a desayunar y a la oficina, que volvería tarde, pero como usted no estaba, pidió que fuéramos por YeJun después.- De algún modo, eso no era algo nuevo, pero KyungSoo se había sentido terrible de muchas maneras, quizás porque era toda la incertidumbre del momento, pero algo de todo eso, sencillamente se sintió peor que antes. Solo llevó sus manos a su cabeza y comenzó a tallar sus sienes con mucha molestia.

Terminó mandando un mensaje a su esposo, esperando que pudiera responder rápido porque la tensión que sentía lo estaba matando, pero en esos momentos, Yeol solo estaba detrás de Baekhyun, besando sus desnudos hombros después de una acalorada sesión en un lujoso hotel Baekhyun dormía profundamente mientras Yeol lo miraba, apreciando cada una de sus facciones, cuando su teléfono sonó por la llegada de un mensaje, pero estaba ignorándolo olímpicamente, hasta que llegó una llamada entrante, Baekhyun se quejó entre sueños y él maldijo de mala gana cuando respondió, sin fijarse quién era.

Good LoversWhere stories live. Discover now