El Festival Deportivo

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Luz...

Una vez más, Melissa se encontraba envuelta en una densa neblina que la rodeaba por completo, pero esta vez era completamente opuesta a la última vez, ahora estaba inmersa en un mundo resplandeciente y luminoso.

A diferencia de la ocasión anterior, esta vez la atmósfera era completamente opuesta a la anterior, un matiz desconocido que la intrigaba cada vez más.

Pensando cada vez más sobre el lugar desconocido, Melissa sintió como su movimiento ahora eran más ligeros; tal vez no podía caminar, hablar; Pero ahora podía mover sus brazos a libertad dándole un ligero suspiro y sintiéndose un poco mejor.

Igual que el anterior caso, Melissa observaba como nuevos recuerdos se manifestaban ante ella, desde la perspectiva en tercera persona, como presenciando escenas de una película.

La chica se sorprendió al ver a una versión de sí misma de 12 años; no era normal verse a sí misma en esa etapa, a la anterior vez solo se le mostraba sucesos que habían pasado solo hace unos meses. Pero ahora había dado un gran paso hacía 3 años del pasado.

Ignorándolo solo por un segundo, decidió concentrarse solamente en lo que estaba viendo y tratar de recordar todo lo que le estaba siendo mostrado para después de despertar.

En este recuerdo, la extrovertida adolescente, se encontraba corriendo por su vida en la zona residencial donde en el futuro sería su hogar temporal. Tras unos breves segundos había llegado a una secundaria muy particular.

Puesto que se trataba de la Escuela Secundaria Orundera, la misma a la que ella e Izuku habían compartido buenos momentos en sus años de juventud escolar.

Inmediatamente Melissa recordó de que evento se trataba su nuevo recuerdo, era casi imposible poder olvidar ese día, pues para ella era el día en que se reencontraría con un viejo conocido de su infancia.

Hoy era su primer día en esa nueva institución y, gracias a la ayuda de su tío, había logrado adaptarse rápidamente al estilo de estudio en Japón. Además de que gracias a sus calificaciones pudo ingresar por recomendación.

La escena mostraba a Melissa corriendo hacia la gran ceremonia de bienvenida para los nuevos alumnos, ocupando el segundo lugar en la lista de los mejores resultados académicos.

Aunque había obtenido una destacada calificación, lo que realmente le importaba en ese momento era hacer amigos y disfrutar de su experiencia en la nueva escuela al máximo.

Melissa: ¡Por fin llegué! Fue un poco ajustado. "Una nueva escuela, nuevo país, nuevos amigos. Espero que todo salga bien." -dijo, intentando recuperar el aliento después de correr todo el trayecto.


Al llegar al lugar, sus ojos se posaron en un hermoso cerezo en plena floración, cuyas ramas se extendían majestuosas, anunciando la llegada de la hermosa primavera.

Melissa: "Según entiendo. Esto es de buena suerte en algunas partes. Incluso si tienes suerte, puedes encontrar al amor de tu vida. Aunque claro eso solo suceden en los mangas y Fanfics" -pensó mirando y tomando una foto al árbol.

???: ¿Dónde ésta?, Estoy seguro que lo deje por aquí. -dijo buscando entre sus pertenencias.

Sin embargo, su atención se desvió hacia un chico que parecía desesperado mientras buscaba algo en su mochila. Intrigada, Melissa se acercó lentamente al chico, notando que en el suelo y a unos metros lejos de él, yacía una libreta de análisis, evidentemente propiedad del chico.

My Heroe Academia: LegadoWhere stories live. Discover now