El reencuentro

4.

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Albus y Scorpius habían planeado miles de cosas para hacer que sus padres se volvieran amigos, claro esto no iba a ser fácil, pero valía la pena intentarlo por lo menos.

Scorpius pensó que sería bueno ir a Hogsmeade ya que había diferentes cosas que se podían hacer como; tiendas, restaurantes, etc... Pero Albus pensó que sería mejor ir a algunas de las casas de ambos y hacer cosas que hacían los muggles amigos como parrilladas o incluso películas o cosas de ese estilo.

Por otro lado, Draco y Harry estaban mas preocupados por como seria la convivencia de ambos frente a sus hijos ya que claro no podían insultarse libremente o cosas así, además tenían que ser maduros y no portarse como unos niños, pero también estaban preocupados por que se les ocurriría a sus hijos y bueno talvez no es la mejor idea dejar que tu hijo de 12 años decida que hacer para convivir con el papá de su amiguito el cual era su rival antes.

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Ya había llegado el sábado ambos niños les dijeron a sus padres por separado que el domingo querían ir a comer helado todos juntos y estos accedieron porque lo prometieron, además sentían que simplemente no podían decir que no y eso era lo mas raro de todo. 

El resto del sábado Albus y Scorpius la pasaron solo con su padre mientras les contaban todo lo que su amigo había dicho sobre  su padre y por ende Harry no podía evitar reírse de las cosas que Albus decía que había dicho Scorpius sobre Draco por que claro quien iba a pensar que un tipo frio y tan serio como él podía ser tan cariñoso y gracioso con su hijo. 

Draco por otro lado a veces si se reía y otras veces se sorprendía de las cosas que Scorpius decía que le había dicho Albus sobre Harry porque en su mente siempre pensó que Potter era algo tonto y muy flexible, pero al darse cuenta que también podía tener su carácter fue algo nuevo un poco ya que creía que él era del tipo "hago todo lo que mi hijo quiera para que no se enoje".

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Domingo 

El domingo a las 3:57 pm, Draco y Scorpius estaban sentado en una mesa de una heladería de Hogsmeade esperando a quien los acompañarían ese día, pero claro los Potter siempre tenían que llegar tarde ya que ellos habían quedado a las 3:30pm y se habían demorado 27 minutos, pero solo les tocaba esperar hasta que llegaron Harry vestía de forma bastante común y cómodo a diferencia de Draco que aunque estaba mas común que otras veces e igual seguía viéndose elegante y pues Albus y Scorpius estaban vestidos de forma cómoda, pero muy lindos.

En la mesa, los menores hablaban muy alegremente mientras comían sus helados, pero por otro lado Harry y Draco estaban serios, tensos y muy incomodos ya que apetición de sus hijos les toco sentarse juntos. 

-Papá, puedo probar tu helado-el menor de los Potter sonrió y hablo cosa que Harry agradeció ya que no portaba el silencio entre él y Malfoy

-Si, toma- Harry extendió la cuchara hacia Albus el cual la tomo por otro lado Draco seguía serio y arqueo una ceja. 

Los niños siguieron en su charla y Harry se canso del silencio, así que miro a Draco y tomo valor para hablarle. 

-E-eh...¿Qué te parece el clima?- Harry se sintió un estúpido como iba a preguntar algo tan tonto, pero ya lo había echo y eso era algo. 

-Pues normal- dijo el rubio sin siquiera mirarlo y Harry frunció el ceño claramente ofendido pues bueno su pregunta no era la mejor para sacar tema se conversación, pero Malfoy había sido tan...frio y seco que eso claro que le desagrado. 

-Que hablador- murmuro, talvez demasiado alto ya que el mayor lo miro de una manera despectiva y muy, pero muy serio. 

-Lo dice él que pregunta por el clima.

-Por lo menos yo lo estoy intentando- el azabache se cruzo de brazos y miraba hacia su heladito. 

-¿Que cosa según usted?

-Sacar tema de conversación o no se ¿convivir? 

Draco se quedo callado pues no podía decir nada ante eso ya que para eso estaban ahí para convivir mas que todo por sus hijos, pero igual no hablo ni hizo nada y así pasaron el resto del tiempo en silencio y con los únicos que hablan eran con sus hijos los cuales notaron que sus padres a penas y se miraron como si el otro no existiera. 

Cuando todos terminaron sus helado y estaban afuera de la heladería se despidieron Albus con un abrazo a Scorpius y un apretón de mano a Draco y Scorpius le devolvió el abrazo a su amigo azabache y le dio un apretón de mano a Harry, y bueno Harry y Draco se miraron muy serios y se dieron la mano, pero rápidamente se apartaron y cada uno siguió su camino a sus casas.  

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