𝑺𝒐𝒚 𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒍𝒍𝒂𝒏𝒐, 𝒑𝒆𝒓𝒐 𝒆𝒔𝒕𝒐𝒚 𝒆𝒎𝒃𝒂𝒓𝒂𝒛𝒂𝒅𝒐.

Capítulo 114

Justo antes de que sus labios se tocaran, un susurro escapó de los labios de Tae-soo.

—Algo que realmente no hicimos mucho.

Kang Se-hun inmediatamente besó a Tae-soo con una mirada en sus ojos que decía que lo sabía. El pensamiento de suavidad vino primero, seguido de un aliento cálido y algo suave. El primer aliento estaba destinado a aguantar bien, y sus labios se entrelazaron sin dejar espacio, seguido de un beso profundo.

Tae-soo, quien había dicho que lo quería primero, cerró los ojos y ​​giró la cabeza.

《No puedo respirar.》

No podía encontrar el momento adecuado para respirar porque la lengua dentro de su boca se agitaba por todas partes. Su corazón latía con fuerza y ​​levantó la cabeza, pero su gran mano lo atrapó y volvió a su posición. Además de eso, le mordió el labio, cosa que no esperaba, y no pudo respirar.

—Umm.

Tae-soo le dio un golpecito en el pecho a Kang Se-hun.

—Espera, un minuto.

Quiero respirar.

Sus labios se separaron sólo cuando sus piernas cedieron y casi cae al suelo, suplicando algún tipo de descanso. Mientras se aferraba a Kang Se-hun, respirando con dificultad, Tae-soo se dio cuenta de algo que había olvidado.

Hyung lo ha estado esperando tanto como yo.

—¿Acabo de tirar una cerilla a una casa en llamas?

—¿Tal vez?

—Tenemos mucho tiempo, pero no planeas tomártelo con calma, ¿verdad?

—Lo pensaré si puedo seguir dejando a Yun-soo en manos de otra persona.

—……Perdí.

Tae-soo se rindió por completo. No es que no le gustara el beso que acababan de compartir, así que, ¿no sería capaz de soportarlo si le daba tiempo para respirar?

—Casi me desmayo hace un momento. A un ritmo moderado....

Las palabras fueron devoradas por los labios de Kang Se-hun. Y como antes, Tae-soo simplemente dejó de respirar debido al beso feroz.

—Debería llamar a mi abuelo.

—¿Al… abuelo?

Tae-soo, quien de repente fue levantado por Kang Se-hun y acostado en la cama, lo miró.

—Le pediré que lo cuide hasta que lo recoja.

—¿Ah?

Kang Se-hun deslizó su mano bajo la camiseta de Tae-soo y se la subió. "Brazos". Con esta simple palabra, Tae-soo se emocionó descontroladamente y su camiseta se quitó.

—Incluso si no lo hace, le agradezco que lo cuide primero, así que no le puedes decir eso.

—No quiero detenerme por la mitad.

Kang Se-hun le dio unas palmaditas en el trasero a Tae-soo. Mientras levantaba las caderas, sintió como se les bajaba los pantalones y la ropa interior. Ahora que todo lo que llevaba puesto había desaparecido, Tae-soo miró a Kang Se-hun. Al contrario de su desnudez, sólo estaba un poco desaliñado con su ropa.

Tae-soo tragó saliva mientras sentía su mirada recorriendo su cuerpo. Kang Se-hun aún no había tocado su cuerpo, pero sintió como si le acariciara solo con su mirada y no sabía qué hacer.

—Ha vuelto a ser como solía ser.

Cuando las yemas de los dedos de Kang Se-hun acariciaron su estómago, se estremeció por la sensación de cosquilleo.