Vento Aureo (Versión Female)

Master Puppet, Parte 2

Fugo sintió el impacto y casi se desploma. Se mantuvo de pie, pero aun así sufrió heridas en la cara.

- Por supuesto, nunca hemos hablado ni hemos sido amigos pero yo si te recuerdo bien- declaró Cartocci- Al principio, creí que eras una mocosa engreída y de temperamento terrible que pretendía ser una excelente estudiante modelo... pero me equivoque contigo.

- ¡Cállate!- exclamó Fugo.

Purple Haze se frustró más y envió una patada directamente a la cara de Master Puppet. Cartocci sintió la herida y le fue indiferente que el Stand de Fugo lograra golpear su Stand.

La patada envió a Cartocci volando hacia el antiguo edificio de la Isla de Lucha. Cartocci aterrizó en el área oscura y sombreada debajo del edificio.

- ¡Toma esto!

Purple Haze disparó sin rumbo cinco de sus cápsulas mortales directamente a Master Puppet. No importa en qué dirección intente correr, una de las cápsulas lo golpeará de alguna manera.

Cartocci, sin embargo, desapareció entre las sombras del edificio. Las cápsulas también desaparecieron dentro de las sombras. Después de unos momentos, Fugo pensó que había derrotado a Cartocci. Purple Haze se acercó al área y tocó el suelo para inspeccionarlo hasta que una mano apareció del suelo y rascó la mejilla de Purple Haze. El Stand se tambaleó hacia atrás de dolor mientras Master Puppet se levantaba lentamente del suelo.

- Esta es la otra habilidad de mi Stand. Me escondo dondequiera que toque la sombra y espero la oportunidad de atacar- le dijo Cartocci a Fugo, quien se agarró la cara ensangrentada- Quedan diez minutos hasta que llegue el barco. Debo terminar esto rápidamente y tengo que esconderme de tus amigos.

Master Puppet soltó los hilos rojos conectados en las extremidades de Fugo, para su sorpresa. Luego, el Stand se hundió en la oscuridad.

Alrededor de Fugo, los colores del ambiente comenzaron a perder rápidamente sus colores. Entonces todo se volvió negro, como si una gran cortina oscura hubiera cubierto toda la isla de Air Supplena.

**

El grupo de Bucciarati se había dividido para encontrar a Fugo, Narancia y Amaretti, cuando notaron que la isla se había vuelto completamente oscura. Se dieron cuenta de que había algo extraño en esta oscuridad; no sólo no pueden ver nada, sino que tampoco pueden oír ningún sonido, ni siquiera su propia voz.

Giorgia, que estaba buscando la cima del Pilar de Escalada con Mista, se sobresaltó y quedó inmovilizada en la oscuridad. 

- ¡¿Qué carajo?!- gritó Mista- Giorgia, ¿Dónde estás? ¡¿Puedes oírme?!

Mista quería disparar su arma y usar las chispas como fuente de luz temporal para encontrar su camino en la oscuridad, pero temía que sus balas rebotaran por la habitación y lo golpearan a él o, peor aún, a Giorgia.

Mientras tanto, el miedo y la desesperación familiares se apoderaron de Giorgia y cayó de rodillas. Comenzó a temblar y empezó a morderse los dedos, algo que no había hecho desde que era un bebé... Una avalancha de recuerdos terribles golpeó a Giorgia y se sentó allí, en un trance parecido a un sueño.

Giorgia tenía trece meses otra vez y estaba sentada en su cuna, mirando alrededor del apartamento oscuro. Estaba agarrando su manta cerca de su cuerpo, mientras intentaba encontrar a su madre. Al final del pasillo, se encendió una luz detrás de una puerta.

- Haruna...- Una mujer la llamaba suavemente.

Los ojos del bebé se abrieron de par en par con esperanza. La puerta se abrió lentamente y la sombra de una mujer apareció en la entrada. Era su madre pero algo andaba mal con ella. La forma de su madre caminó por el pasillo y mientras se acercaba, Giorgia pudo ver que sus ojos y boca salían sangre en cantidades y gemía como un zombi. La pequeña Giorgia estaba aterrorizada y comenzó a retorcerse, pero su madre la tomó en brazos y la abrazó. Giorgia estaba demasiado paralizada por el miedo como para gritar.