Pequeño lobo arrepentido.

86. Dormir de noche. (8/10)

"Quién sabe", bostezó Qin Chi, "Ba Ge, me voy a dormir".

"Está bien, conmigo aquí, puedes dormir tranquilo".

Qin Chi regresó a la tienda de campaña y enseguida se quedó profundamente dormido.

Ba Ping se quedó mirando en su lugar por un tiempo, pero decidió no investigar más. Era mejor evitar problemas innecesarios.

A la mañana siguiente, todos los refugiados en los vehículos se despertaron, se prepararon y estuvieron listos para partir.

Zhao Fengnian estaba agachado en el suelo, mirando fijamente a Wen Jia mientras se cepillaba los dientes.

Wen Jia se sentía extremadamente incómodo por su mirada y casi se traga el enjuague bucal.

"¿Qué estás mirando?" Si no supiera que esa persona no tenía malas intenciones, Wen Jia habría querido golpearlo.

Zhao Fengnian mostró confusión en su rostro. "He querido preguntar esto desde hace mucho, ¿ustedes escondieron un Doraemon? ¿Por qué tienen todo tan completo, incluso pasta y cepillos de dientes?"

No solo ellos seis, incluso Zhao Fengnian, que era un forastero, tenía un cepillo de dientes de repuesto, así como gel de baño, jabón y toallas, nada les faltaba.

Wen Jia respondió sin inmutarse: "Qin Chi, lo conoces, su esposo Zhang Zhi es muy rico y él mismo tiene un gran centro comercial. Cuando escapamos de Luo City, estábamos bien preparados en términos de suministros".

Zhao Fengnian no sabía si creerle o no, y preguntó de nuevo: "¿Y qué hay de su caravana?"

"Doraemon lo guardó en su bolsillo".

"¿...Qué?"

Mu Zi llegó con un tazón de sopa de mariscos instantánea en la mano y miró curiosamente a los dos. "¿De qué están hablando?"

Wen Jia empacó silenciosamente sus utensilios de aseo y dejó a Zhao Fengnian, que tenía tantas preguntas, en manos de Mu Zi.

Zhao Fengnian miró a la espalda de Wen Jia, rascándose la cabeza confundido. "Solo estaba preguntando. Y si realmente tuvieran un Doraemon, no se lo diría a nadie. ¿Por qué huir tan rápido?"

Él no sería capaz de hacer algo tan ingrato y vengativo. Mu Zi no entendió de qué estaban hablando, así que dejó su curiosidad de lado y le dijo a Zhao Fengnian: "Oh, Zi Ge te está llamando, ve con él por un momento".

"Está bien, iré de inmediato. Gracias por hacer este pequeño favor, niño", dijo Zhao Fengnian con una sonrisa mientras acariciaba la cabeza de Mu Zi, y se dirigió hacia la tienda de campaña del todo terreno.

Lao Yuan y Ba Ping estaban desmontando las tiendas de campaña cuando vieron a Zhao Fengnian acercarse. Los adultos se sentaron juntos en el vehículo.

Ba Ping sacó un folleto y dijo: "Mira, lo encontré en el camino esta mañana".

"¿Qué es esto?" Zhao Fengnian lo tomó y lo miró. "¿Un refugio?"

Zhang Zhi continuó, "Sí, es un nuevo refugio que se ha establecido. Están reclutando a personas con cierta capacidad de autodefensa y que estén dispuestas a unirse en solidaridad".

Incluso si el gobierno exigía recibir a los sobrevivientes de áreas gravemente afectadas como ellos, ninguna ciudad se atrevería a acogerlos. Eran como hojas flotantes sin raíces, excepto por los refugios construidos para los sobrevivientes, no tenían ningún otro lugar al que ir.

Era posible que este nuevo refugio recién establecido sea muy básico y su estructura no estuviera completamente desarrollada, pero al menos era un lugar donde podían descansar temporalmente.