-Y si eso sos! Una puta!- me grito Lisandro en mi cara, mi boca tomo forma de O, cómo se atrevía a decirme eso, el sabía lo que causaba esa palabra en mi y fue el primero que dijo que no me la diría, miren ahora, hipócrita.
<<<minutos antes>>>
-llegue!- dije exhausta, había llegado del trabajo, el día fue agotador, tuve que lidiar con gente y también gente mayor que se piensa que poniéndole las recetas caseras que encuentra en Google a su perro se le va a curar todo.
Le había traído un regalito a Lis, va lo había pedido hace unos días y hoy lo pase a buscar, era un Funk Pop de el.
-Lis! Miraaa- dije buscándolo por toda la casa, entre a la pieza y lo ví acostado con el celular, ya en si cuando entre a la casa me pareció raro que no estuviera en la cocina pelotudeando como de costumbre.
Vi como ni se esforzó en mirarme ya que seguia deslizando la pantalla de su celular -Eu Lis- dije mirandolo con cara apenada, no quería tener una pelea con el así que trate de llamarlo de la mejor manera posible.
-qué querés Paulina?- pregunto mirándome con cara sería, fruncí el ceño y lo mire confundida, me senté al lado de el -te pasa algo?- pregunte.
-te importa?- fue lo que recibí como respuesta.
-y si, por algo te pregunto crack- dije sarcástica, ja ja soy una boluda.
-que bueno genia- hablo Lisandro levantándose de la cama para dirigirse a la cocina, lo seguí por detrás.
-me podés decir lo que te pasa?- pregunté la misma cosa que le venía preguntando hace rato.
- sabes que me pasa?- pregunto y negué.
-me pasa que me acabo de enterar que tengo a una puta como novia!- grito, estaba re confundida, mi expresión cambio de a dudosa a ofendida.
-por qué decís eso?-
- no te hagas la desentendida conmigo Paulina! No pensabas decirme que te diste un beso con Leandro en la joda?-
-Qué decís pelotudo?!-
-lo que escuchaste, sos sorda?-
-de dónde sacaste eso, porque el que te informo te informo re para el ojete-
-Me enteré por una foto que me llegó!-
-mostrame esa foto-
Me la mostró y no podía estar más equivocado, se ve que no me conocía ni un poco, esa no era yo, ni tenía un tatuaje en el muslo de la pierna, tampoco tenía ese anillo y esos tacones menos.
-Lisandro esa no soy yo, ese tatuaje en el muslo, no lo tengo, mira- dije mostrándole mi muslo, su expresión de enojado cambio a "nooo la re caguée".
-esos tacones, no los usaría ni en pedo, vos sabés que no me gusta usar tacones muy altos porque a vos siempre te gusta ser el más alto, la cuál acción demuestra tu grado de misoginia, aparte ese anillo, no lo tengo, solo tengo el que me regaló mi hermano y el que me diste vos, pensa un poco antes de llamarme puta sabiendo que me duele más que nada en el mundo y vos muy bien sabes el porque, hipócrita!- dije moviendo mis manos, mis ojos se iban poniendo cada vez más llorosos, Lisandro me miraba con cara de lastima cada vez que hablaba.
