Capítulo 2

1.7K 159 1
                                    

No era extraño ver a la princesa de ocho años de edad corriendo por los pasillos de la fortaleza roja de un lado al otro, está vez siendo perseguida por Aemond quien trataba de atraparla.

-DANY CUIDADO

Demasiado tarde, Daenerys se chocó con violencia contra una pared, rebotó contra el piso antes de contraer su rostro tratando de no llorar por el golpe.

-¿Dany estás bien?- Aemond tomo sus hombros con delicadeza- Daenerys llamaré al maestre

-NO... estoy bien solo me dolió un poco... continuemos

Su carrera continuo hasta el patio de entrenamiento donde se encontraban Ser Criston y Aegon

-Tarde principe

-Mi culpa... me caí y Aemond me ayudó

-No vuelva a caer princesa o retrasará a todos... no disponemos de entrenamiento a corde a su tiempo

Daenerys frunció el ceño confundida, las personas no solían hablarle de esa forma, todo lo contrario siempre eran amables con ellas por lo que respondía de la misma forma.

-Por supuesto Ser Criston

Daenerys tomo su espada de madera y alejo de sus tíos decidiendo practicar sola ese día, de reojo observaba a sus tíos entrenar con Ser Criston y aunque no lo dijo en voz alta, la niña estaba completamente segura que Ser Criston era un pésimo maestro.

-¿Dónde está mi sobrina favorita?

-TIO DAEMON

Daenerys corrió lo más rápido que pudo hacia su tío favorito, Daemon la cargo y devolvió el abrazo con el mismo entusiasmo, al separarse el principe tomo de la cintura a la niña para luego levantarla hacia arriba haciendola reír.

-Te extrañe tanto tío...nadie me enseña cómo tú

-¿a mí no me extrañaste?- pregunto Laena con una sonrisa, rápidamente Daenerys se bajo de los brazos de su tío para abrazar a su tía Laena

-¿Se quedarán mucho tiempo?- pregunto emocionada

-Unos días- respondió su tía- Te dejare para que entrenes con tu tío ¿si? No hagan tanto lío

-Lo intentaremos

Rápidamente las miradas se posaron sobre ambos principes quienes ocuparon
mayor espacio en el patio de entrenamiento, sin dudas Aegon y Aemond miraban emocionados la escena, Daemon era un guerrero legendario y tener posibilidades de entrenar con el sería un gran honor.

-¿puede unirse Mond?- pregunto Daenerys- El es muy bueno

-Tal vez otro día- Daemon intento negarse

-Pero al menos míralo ¿Si? Es muy bueno... ¿Si?

-Esta bien

-MOND ven mi tío quiere verte luchar- Daenerys lo llamo con emoción, Ser Criston intento evitarlo pero la mirada del principe lo detuvo, Aemond se acercó a ambos platinados para luego ser obligado a luchar contra Daemon.

Tanto Daenerys como Aemond se pusieron a luchar contra Daemon quien había quedado bastante sorprendido del niño Hightower pero no había forma que lo admitiera pero sin dudas Daenerys era mejor que el y cualquier otro niño.

-No eres tan malo engendro... no das tanta vergüenza ... vamos Dany un pastel nos espera

Con una sonrisa en sus labios Daenerys se despidió de sus tíos antes de correr hacia Daemon y tomar su mano, juntos fueron hasta la cocina donde las damas tenían listo su pastel.

-Buen día Mary

Daemon se sorprendió de la confianza que su sobrina tenía esas mujeres y la forma tan poco cordial de las damas de saludarla.

-Buen día Daenerys ¿disfruto de las galletas?

-Mamá me las quito... gracias tío- agració la niña al ser subida a su asiento- Dice que no es bueno comer tantos dulces ¿Guardaste bien las que le pedí?

Mary sonrió antes de agacharse y sacar un frasco con galletas, Daemon rio, su sobrina era demas inteligente, ser amiga de las cocineras significaba esconder y traficar dulces.

-¿Las llevaste dónde pedí Ana?- pregunto Daenerys

-Asi es Daenerys los niños quedaron encantados y le agradecen su generosidad

-¿dónde enviaste galletas?- pregunto Daemon poniendo nerviosas a las dama presentes

-A los niños del orfanato- respondió con sinceridad- Ellos no comen casi nunca dulces y el abuelo me permito regalarle galletas

-Eso fue muy amable- comento Daemon con ternura

-Aqui están

Daenerys sonrio al ver a su padre para su suerte Mary había sido lo suficiente rápida para esconder las galletas de otra forma ambas estarían en problemas.

-Mi padre desea llevarte a navegar- comento Laenor

-Lo se... yo se lo pedí... Aemond y yo iremos a navegar con el abuelo

-¿Aemond? Cariño no creo que su madre le permita ir

-Su madre no pero el abuelo si- respondió- Yo ya me encargue de ello

Su madre no estaba feliz con su partida, odiaba cuando Daenerys se iba con Lord Corlys, todo se sentia tan vacío sin el espíritu alegre de su dulce niña, Viserys había tratado de negarse a que su nieta se fuera, sin dudas su mayor alegría desaparecía por varios días.

El rey no podía negar que le sorprendió el pedido de su nieta, Daenerys era muy celosa de sus abuelos pero al parecer creía que era buena idea llevar a Aemond con ella situación que le alegro poco a poco su familia se iba uniendo a ellos, lamentablemente a último momento tuvo que informarle a su nieta que no sería posible la presencia de su sobrino en el viaje. Alicent había insistido tanto que convenció a esposo de impedir la partida de su hijo.

-Cuidate mucho ¿si?- pidió Rhaenyra con tristeza- obedece a tu abuelo y si algo sucede no dudes en volver

-Estare bien mamá- se quejo Daenerys- Los hombres del abuelo me llaman el terror de la serpiente marina

-Si pero eso es porque te quedaste atorada e el mástil cielo y casi mueres

-Detalles poco importantes madre

El viaje había Driftmark había sido demasiado largo para su propio gusto, Daenerys no veía la hora de llegar e irse con su abuelo por dos lunas enteras en el mar.

-Abuelo

Lord Corlys cargo a su nieta en sus brazos antes de darle un giro haciéndola reír, abuelo y nieta se abrazaron con cariño

-Mi dragón de mar ¿Lista para una nueva aventura?- pregunto Lord Corlys con emocion, sin dudas su primer nieta era toda una Velaryon que amaba el mar

-Por supuesto... ¿la abuela? Le traje un obsequio

-Con Meleys- respondió- ve

Quien más estaba emocionada por el viaje era Rhaenys quien podría pasar dos lunas con su nieta consentida, ocho semanas mimandola y disfrutando de su presencia, no le emocionaba el viaje en barco pero estaba dispuesta a soportarlo por Daenerys.

A lo lejos Meleys y Rhaenys estaban acurrucadas, la segunda abrazando el hocico de la primera, Daenerys no se detuvo corrió hasta estrellarse entre su abuela y su dragona quienes recibieron el cariño con emoción.

-Hola Meleys te vez bonita... Te extrañe abuela

-Yo también mi dulce nieta ¿Lista para un viaje familiar?

-Lista para estar rodeada de olor a pescado por dos lunas- la afirmación de la niña hizo reír a su abuela, sin dudas Daenerys no tenía vergüenza a decir lo que pensaba, osada como toda una Velaryon

-Que bueno de todas formas no te salvas de bañarte

Daenerys tenía un plan para ese viaje que sin dudas lo cumpliría, sabía que la ambición de su abuelo era alta y sin dudas aceptaría ayudarla con tal de darle gloria a la casa Velaryon, en dos lunas sería la mujer más poderosa de poniente

the terror of the greensWhere stories live. Discover now