De mi propiedad | Iguro Obanai yandere

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Te aleje al instante, solo espero que no hayas sentido mi bulto, si no, juro que me voy a pegar un tiro.

[NARRA SUYEN]

Mhh....¿Porque Iguro-san me alejo? El jamas me había alejado antes de un abrazo....¿Porque siento que hoy esta actuando más raro de lo normal? ¿Y porque se tapa su entrepierna? ¿Le duele ahí,o como?

Me daban ganas de preguntarle, pero sentí que se iba a enojar por alguna razón....creo que sería mejor mantenerlo así.

Quizá otro día le pregunte.

— ¿Te sientes bien, Iguro? — No aguante, pero en verdad, se veía enfermo! Incluso tenía toda la cara roja, ¿será por resfriado?

— Perfecto, ¿tu estas bien? ¿A ti te duele el cuerpo o algo así? — Encuesto, pero la verdad....yo no le creía que estuviera bien.

— Bueno, ami no me duele nada....seguro que estas bien? Tienes tu cara completamente roja....¿te duele...ahí abajo? — Lo siento, pero ya no podía aguantar más mi curiosidad.

Ante mi pregunta note como se puso rojo, completamente rojo, ahora sus manos también estaban así.

Si esta enfermo, necesitaba llamar a Aoi!

— Llamare a Aoi, hay vuelvo. — Me di la vuelta, pero antes de que empezará a caminar Iguro me agarro de la muñeca.

— ¡No es necesario! — Se veía preocupado y algo serio.

— ¡Pero de verdad necesitan revisarte! — Antes de que dijera otra cosa, este me jalo hacia el.

Caí en su pecho en el cual me aferre para no caer, alze la mirada encontrándome con sus ojos de diferente color.

[NARRA ESCRITORA]

Ambos rozaban sus narices, Iguro se puso más nervioso que antes pero por alguna razón le causó excitacion estar así contigo, sentir tus pechos en su abdomen....

— (Mierda, Suyen, si me sigues mirando así, no se de que seria capaz de hacerte....) — Ambos se alejaron con un leve sonrojo.

Iguro te dio la espalda y miró de reojo su bulto, ya no sabía si podía ser capaz de aguantarlo más.

Entonces, decidió ir a atenderlo de nuevo.

— Ahora que lo pienso, se me olvido algo en el pasillo, hay vuelvo rápido, tu ve bajando abajo, allá te veré  — Comento y después se acercó a ti. — He notado que te cayó bien Kaburamaru, si quieres llevatela. —

Hablo mientras se iba quitando a la serpiente de su cuello, la cual lo miró con confusión antes de enrollarse ahora en el cuello de la chica.

Tu y Kaburamaru se quedaron viendo como Obanai se iba.

— ¿Crees que me esta mintiendo...? — Le preguntaste, este asintió y tu soltaste un suspiro lleno de frustración.

Con la serpiente, ustedes dos bajaron las escaleras, tu tenias la mirada al suelo mientras le acariciabas la cabeza al animal quien disfrutaba de tus caricias, también frotaba su cabezita en tu mejilla tratando de animarte.

— Hoy note a Iguro-san algo diferente a como es en otros días....es decir, se que probablemente esta pasando un mal día o un mal momento, pero lo que me duele esque no me quiera decir.... — Le platicaste a la serpiente quien parecía atenta a lo que decías.

Esta furfullo, tu la miraste. Tenias una idea de lo que había dicho gracias al tono que uso.

— Si...seguro es eso. — Volviste a mirar al suelo.

Una vez que llegaron al primer piso, caminaron por el pasillo hasta llegar a la sala principal, donde estaban las 3 niñas jugando al te, cuando notaron tu presencia, te vieron y las tres se sobresaltaron al verte.

— ¡Señorita Suyen!  ¿Esa no es la serpiente de Iguro? — Te pregunto Sumi.

— Si, si es, me la presto. — Dijiste nerviosamente.

Ante tus palabras las 3 pequeñas parecieron asustarse más, se miraron entre si para después susurrarse también entre ellas.

¿De que estaban hablando?