Capítulo 6

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Cierta personita cuyo usuario no voy a mencionar... (areagonzalesernesto) Dice que ama este librito especial. En serio me alegra mucho que le guste. Amo leer sus comentarios. En fin, gracias por tu apoyo y a leerrr...

SOFÍA

No me sorprendió mucho ver a mi hermano tan cerca de la chica nueva. Se nota que Ara es interesante para Axel. Hacen una linda pareja cuando están juntos, pero ellos no se dan cuenta. Mis hermanas —a mi lado— y yo nos miramos. Prácticamente compartíamos la misma mente. Actuábamos parecido y pensábamos exactamente igual.

Nuevo plan malvado desbloqueado: juntar a esos dos.

Exactamente, mi querida conciencia.

Ni siquiera estoy muy segura de haber visto a mi hermano tan interesado en alguien.

O cerca de una chica.

Llegué a pensar que había salido igual que el tío Aaron.

Los alumnos entraron a la escuela. Perdí a Axel entre la multitud. Mis hermanas y yo nos quedamos al lado de la entrada principal. A la izquierda había una maceta con una planta muy bien cuidada.

—Debemos hacer que se junten —hablé yo con una sonrisita, cruzándome de brazos.

—Estoy de acuerdo —murmuró Julia.

—Yo igual —comentó Lizt.

—Y yo. Además, tengo algo que tal vez pueda servir para demostrar algo —soltó Miley.

Todas las demás le prestamos atención.

—Creo que Ara tuvo un sueño erótico con nuestro hermano. Ella no paraba de pronunciar su nombre mientras dormía —expuso ella.

—Eres su compañera de cuarto. Podrías averiguar unas cuantas cosillas para el beneficio de todos —sugerí yo.

—Hay algo más, ella es lectora —añadió Miley.

—Y su escritora favorita es nuestra madre —finalizó la menor.

Nos dirigimos a nuestros respectivos salones. Al menos yo logré llegar a tiempo antes de comenzar la clase. No sé si mis hermanas habrán llegado a tiempo.

Casi unas ocho horas después la campanada de la salida resonó por toda la escuela. Los alumnos salieron en orden. Yo me quedé un rato más terminando mis tareas de clase.

Y fue un grave error.

La puerta se cerró de momento. Alarmada por esto me levanté de mi asiento y me dirigí a la puerta del salón. Puse mi mano en la parte de la cerradura. Empecé a empujar y a desesperarme una vez que vi la puerta no abrirse. Me había quedado encerrada.

Seguí intentando abrir la puerta con más fuerza pero nada.

La desesperación me consumió en solo unos segundos que parecían una eternidad.

—¡Ayuda! ¡Me quedé encerrada! —grité aunque nadie me escuchó.

Llegué a un punto en que se me nubló la vista. Toda mi visión se volvió blanca. No veía nada. El aire empezó a faltarme de repente. Intenté apoyarme en alguna mesa a mi alcance para no perder el equilibrio. Así y todo fue en vano. Caí al suelo.

El ambiente se sentía extraño. En un intento por levantarme del suelo volví a caer.

Al lado de la puerta había un objeto. Era algo así como una bomba de gas que dormía a las personas.

Billonaire [Parte 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora