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Al mirarse al espejo solo podía ver la tristeza reflejarse en su mirada, aunque el vestido de novia era totalmente hermoso, no se sentía feliz por este día, la cual muchas mujeres consideraban importante.

Sakura solo se sentía devastada y triste, pero no podía demostrarlo a cambio tenía que fingir una sonrisa.

Sabía que luego volvería a caer en llanto en la noche.

¿Por que su padre la odiaba tanto?.

A tal grado de casarla con cualquier hombre, solo por negocios, ¿Que clase de padre era el que tenía?.

Aún así no podía odiarlo, pues es el ser que la trajo al mundo.

Su padre nunca le demostró cariño o afecto, pues él la veía como el monstruo que asesinó a su madre.

Pues su madre murió al darle a Luz, haciendo que su padre la mirase con despreció, por eso nunca recibió amor de su parte y de ningún otro familiar, ecepto por Sasori.

Su hermano mayor, quien se encargó de cuidarla y protegerla con mucho amor y alegría.

Por eso se sintió sola y desprotegida cuando su hermano se fue a. Nueva York y la dejo con el maltrato de su familia, quien la había educado para ser una completa sumisa para su futuro esposo.

Cosa que no iba hacer.

Pero aunque intentará hacer algo, ya el daño estaba hecho, y hoy era su boda con la persona que la había comprado.

- ¿Estas listas?- pregunto su tía entrando a la habitación.

Sakura se levantó sin decir nada se cubrió el rostro con su velo, y empezó a caminar pasándole aún lado de su tía, quien sonreír con burla y soberbia.

- no sabes lo feliz que estoy por que ya no serás un estorbo en nuestras vida nunca más- hablo su tía con verdadera satisfacción.

Más Sakura la ignoro por completo, y siguió su camino, en la entrada de donde se llevaría acabó el matrimonio, estaba su padre quien al verla, una sonrisa apareció en sus labios, pero no era una sonrisa la cual un padre demostraba cuando veía a su hija. Sakura sabía que esa sonrisa era una llena de alivio y alegría, alegría porque ella se iría de sus vidas.

Mientras que ellos de hacían más ricos, gracias a Sasuke.

Quien iba a colaborar con la empresa de su padre y manejarlas una vez ella cumpliera un año de matrimonio, como lo estaba en el contrato que ambos firmaron.

Al principio ella creyó que su padre no aceptaría, pero tal parece que las ganas que tenía su padre de desacerse de ella eran mucho más fuerte, que su codicia y eso la lastimaba mucho.

- sonríe Sakura, que hoy es un día muy importante para ti- comento su padre una vez que ambos estuvieron de frente.

"Querrás decir que es un día especial para ti, así ya no seré más un estorbo en tu vida"

Pensó con amargura la pelirrosa, quien ya estaba lista para empezar, a caminar lo que sería su tortura.

Las puertas se abrieron y la típica música que siempre se tocaban en las bodas empezó a sonar. Su padre la llevo al altar, la pelirrosa noto algunas sonrisas de algunas de sus familiares y sus supuestos amigos.

Todos eran unos hipócritas.

Ecepto por dos personas a la que quería mucho, su hermano y su amiga única y verdadera amiga de la infancia Ino.

Ambos quienes estaban entre la multitud veían a la pelirrosa con tristeza, por no poder hacer nada para salvarla de aquella tragedia.

Sasori estaba bajo amenaza por parte de toda la familia, y aunque intento llevársela su padre no le permitió siquiera verla, hasta que fue demasiado tarde.

Nuestra condena de amor ⛓️🌸 SasusakuOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz