Mia;Peso Pluma

𝟐𝟕

Estábamos desayunando con Hassan. Hoy íbamos a ver todo lo de la boda porque mañana viajamos ya que seguíamos en su gira.

–Vamos papi. Que la de señora de la iglesia nos debe estar esperando.-Lo tome de la mano pero el me agarro y me beso.

-No me digas así cuando estamos por salir que me quedo aquí y te hago mía.-Me alzo y me llevo hasta la camioneta.

-Gracias papi.-Le sonreí y el me miró mal.

-Tu misma vas a pagar las consecuencias.-Me señaló.

-Con gusto.-Le guiñe el ojo.

Agarre su teléfono, al ver su fondo de pantalla se me escapó una sonrisa. Era una foto mía que el me había sacado en Grecia, le dejé un corto beso en su mejilla. En el carro empezó a sonar "HOUSE OF LUX" de Dannylux.

-YO TENGO LO QUE TÚ QUIERAS.-Cantábamos los dos-SABES QUE NO SOY CUALQUIERA.-Hassan levantaba las manos mientras bailaba.

-¡¡¡Hassan, vamos a morir!!!-Río y puso las manos en el volante. Seguimos cantando las tristes canciones de Danny hasta que llegamos a la iglesia.

No era mucho lo que hacíamos ahí. Elegíamos la fecha que sería el 28 de octubre y había que darle una ayuda a la iglesia a lo que Hassan ayudó con un fajo de dólares. A lo que a la señora y a mi nos sorprendió. Salimos de ahí y agarre a Hassan de la mano.

-Verga Brunella. En un mes nos vamos a casar.

-¿Que ya no quieres?-Dije preocupada.

-No mames. ¿Como crees?. ME VOY A CASAR CON EL AMOR DE MI VIDA-Me alzo y empezamos a dar vueltas en el medio de la plaza. Una señora nos miró raro y Hassan le dijo-Señora, me voy a casar y tener un hijo con la mujer que amo.-Me señalo.

-Eso todos lo dicen hasta que te engañan.-Dijo la señora. Era Nata en el cuerpo de una señora.

Fue una mala idea que Hassan haya gritado eso. Se lleno de gente y la wedding planner nos esperaba.

-¿Nos podemos sacar una foto contigo?-Dijeron unas chicas medias tímidas.

-Simon chulas.-Eso había sido muy Hassan de mi parte-Fue muy Peso de mi parte, ¿verdad?-Ellas dijieron que si y rieron.

-¿De cuantos meses estás?-Pregunto una de las chicas.

-Tres meses recién cumplidos.-Les sonreí y ellas tocaron mi vientre-Ellas son tus tías, peso plumita.-Otra mano toco mi vientre, era la de el.

-¿Ya conocieron a Peso Plumita?-Hassan le pregunto a las chicas y ellas asintieron. Se tomaron una foto con el y luego nos sacamos los cuatro.

Teníamos una hora de viaje. Así que procedí a poner El Makabelico.

-Y QUE RETUMBE EL BASE. YO SOY COMO EL SCARFACE-Hassan solo reía al oírme cantar. Desde que lo había conocido siempre había sido fan del Makabelico y después ese fanatismo pasó a mi-SOY EL CARA CORTADA, COMO TONY MONTANA-Se unió a mi. Bajo el volumen y habló.

-Mi reina hermosa. Pasan los años y todavía no creo que escuches El Makabelico, pero mames te ves bien buena cantando esas canciones-El semáforo dio en rojo así que unió nuestros labios en un corto beso.

Llegamos al lugar. La señora nos recibió muy alegre.

-Mi hijo es fan tuyo y yo ahora también. Después nos podríamos sacar una foto y mandarle un saludo a él-Sonrío la señora.

-Simon. Espéreme dos segundos que creo que tengo merch en la camioneta.-Busco dos sudaderas que tenía en la camioneta y se las dio a la señora. Justamente yo tenía su merch puesta.

-Muchas gracias, señor Peso. No se hubiera molestado.

-Hassan para usted. Y a mi no me molesta me encanta siempre que puedo regarle algo de mi merch a los demás.-Sonrío y abrazo a la señora-Que pena que su hijo no esté aquí, me encantaría haberlo conocido. Así que mandémosle un video.

Hassan grabó el video y luego yo les saque una foto. Luego de estar platicando un buen rato con la señora.

Con Hassan hacíamos un gran equipo, ya teníamos decidido lo que queríamos. Viajar de una punta a la otra nos hacía ver ideas y cuando vinimos aquí ya estaba todo decidido. Terminamos el día bien cansados.

Falta lo más importante, mi vestido. Que ya lo estaban terminando de hacer pero faltaban algunos detalles.

-Tengo ganas que durmamos bien abrazaditos los dos.-Imité la seña y el reía.

-Simon, chula. Yo también quiero eso.-El se escondió en mi cuello y nos quedamos profundamentes dormidos en el sillón.

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Ay, ay, ay. Queda muy poco para el final🥺