Capítulo # 47 | La verdad sale a la luz

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Narra Tyler

Cuando vi a Landon en la habitación supe que las cosas no iban a terminar bien. Landon es como decir la palabra mierda. Por la cara de Samy piedp decir que las cosas van mal. Landon le dijo algo que desapareció la sonrisa de Samy. No se que pudo haber sido.

- Landon puedes irte Tyler y yo tenemos cosas que aclarar- las palabras de Samy fueron secas

Landon se va con una enorme sonrisa y las ganas de sacarle los ojos aumentaron demasiado. Lo único que me lo impidió fue el sonido de Samy separándose de mi. No quería perderla.

- Samy dejame explicarte- intento tomarla del brazo pero ella se aparta las lágrimas amenazan por salir pero no lo hacen. Samy es fuerte, no es ese tipo de chicas que hacen un drama de película. Ella odia que las personas sepan de sus sentimientos.

Eso me encanta de ella que a pesar de ser ruda es tierna al mismo tiempo. Se que he cometido muchos errores pero no quiero alejarla de mi.

- Alejate de mi- dice entre dientes. Se que esta muy enojada pero quiero que me escuche

- No hasta que me escuches Samy no es lo que piensas- la sujeto del brazo

- Que no es lo que pienso - me expeta furiosa. Esta fuera de sus casillas- pues iluminame porque hasta donde sé estabas besándose con una chica mientras yo trataba de hacerte feliz

Sus palabras me dolieron nunca pense en que Samy se preocupara tanto por mi. Pensaba que yo iba terminar con el corazón roto y veo que fue al revés me siento como un idiota.

- Samy yo..- las lágrimas empezaron a salir de sus ojos y mi corazón sintió un estrujon nunca quise lastimarla.

- Tu nada eres la peor persona que he conocido desearía nunca haberte conocido- sus palabras me dan justo donde duele. La dejo que se vaya al cuarto le daré espacio. Sé que lo necesita.

El tiempo pasaba y ella no salía ni un simple ruido se escuchaba en la habitación. Decidí asomarme un poco para asegurarme de que al menos estaba viva. Camino a la habitación y entre abro la puerta. Samy estaba llorando el alma se me fue a los pies.

Samy no es persona de llorar y que por más débil se sienta esta sonriendo de una forma que las personas no se percaten de su dolor. Es como de piedra la puedes lanzar mis veces y nunca se quejara. Se que estuvo mal de mi parte besar a una chica que ni conocía pero fue por una buena razón.

No podía verla llorando me duele más a mi que a ella. Siento la necesidad de llamar a Math el sabría que hacer además de que me conoce y el porque de mis acciones. No lo hago porque Math no va estar siempre para mi debo resolver mis propios asuntos.

Entró a la habitación y veo que Samy no se a percatado. Sin hacer ruido me acerco, no porque esta media dormida sino que puede golpearme y dejarme inconsciente aunque eso es lo que merezco. Me siento de rodillas enfrente de ella. Allí es que levanta la vista

- ¿Qué hace....?- no la deje terminar la bese como nunca antes se que por mi culpa esta así. Que soy yo el causante de que derame esas lágrimas no las merezco.

- No llores por favor me duele verte asi- susurro pegando mi frente a la de ella. Samy se aparta bruscamente y me mira con odio. Su mirada parece estar debatiendo en que hacer. Después de unos segundos su mirada se oscurece.

- Eso debiste pensarlo antes de engañarme- sus palabras son dichas con odio y rencor y lo endiendo yo también estuviera así

- Samy te lo puedo explicar- sus manos van directo a mi cara estampandola. Dejo un terrible picor. Mi mano instintivamente paro allí.

- ¿Qué puedes explicar? que eres un cerdo de mierda, que besa a cuanta mujer hay en la calle,- su mirada me dice que esta aguantando las ganas de matarme- que eres como dicen, eres todo un amor antes del sexo pero después de que te abren las patas eres un idiota que solo le preocupa acostarse con cuanta chamaquita hay y sabes que es lo peor que creía en ti quería vivir una vida a tu lado ahora no quiero estar ni 5 segundos.

Si pensaba que sus palabras no me iban afectar nada más me equivoque. Sus palabras son como dagas filosas al corazón. Me duele saber que perdí un buen futuro con la chica que amo. La misma que me hacer reír y al mismo tiempo enojar, la chica que me golpea pero también me besa. Lo perdí todo por una estupidez.

- Si me das 10 minutos te lo puedo explicar- le suplicó sé que es terca pero de verdad necesito que sepa la verdad

- 5 aprovechalos porque después de eso me voy- por mi cara supo que a que me voy significa- me largo de sus vidas

Las lágrimas estaban a punto de salir no podía permitirlo me siento como idiota. No la dejare it sin antes luchar.

- La chica que bese no la conozco- su mano en mi mejilla me interrumpió sus cachetadas duelen más que un puño. Al menos el puño el dolor se va rápido.

- Sabes que no quiero escuchar nada- le levanta de la cama para salir con una maleta- eres un cretino

La tomo de la mano no puede irse sin antes escuchar.

- Samy solo escuchame por amor a Dios- le expeto ya cansado de suplicar ese no es mi estilo- Dios jamás le he tenido que explicar a un mujer el porque de mis acciones y por primera vez que lo hago no me dejas terminar sabes cuantas mujeres matarían para que les suplique como te estoy haciendo a ti. Si me dejas explicarte lo entenderás.

Puedo ver que no esta segura del todo pero una parte de ella quiere escuchar lo que tengo que decir pero la otra solo quiere golpearme hasta matarme.

- Avanza que me quiero largar- expeta algo cansada

- La chica que bese no la conozco la bese para poder huir sin que me siguieran, no podía exponerte. Quiero protegerte y jamás dejaría que alguien te haga daño. Los hombres de unos de los grandes me estaban persiguiendo para que entregara un paquete pero no podía ese paquete significa mucho para mi y no lo pienso entregar a nadie por nada

Siento que ella sabe algo porque su mirada es de odio pero a la misma vez amor.

- Me quería entregar a Ross ¿verdad?- sus palabras me dejan congelado como sabía eso el único que lo sabe es Ross y Math. Dudo que Ross hayaa hablado con ella lo único que me queda es Math.

- ¿Cómo sabes...?- una sonrisa sale de sus labios pero no de esas que das cuando estas feliz si no de esas que significan que están apunto de matarte

- Te escuche hablar con el hoy frente a la farmacia y según tu yo no soy nada para ti- no sé que da más miedo sus palabras o su mirada. Esta chica es capaz de matarme y nadie la descubriría.

- Dije todo eso para que Ross no mandara hombres para seguirte- le explico con las esperanzas de que aún confíe en mi- él pensaba que lo iba a traicionar después que la transacción estuviera hecha.

- Y qué ibas hacer entregarme y ganar cuanto $10 mil- me dice decepcionada

- $100mil por entregarte a él-respondo avergonzado

- Eso es lo que valgo para ti que bueno saberlo- sus palabras fueron tan frías que me dolieron

- No te iba a entregar- le explicó caminando hasta ella- huiría con el dinero y contigo

- Robarle a Ross es imposible- me dice como si ella lo hubiera hecho- solo una persona a popido robarle y soy yo

- La única persona que le ha podido robar a sido su hija y ella está muerta- le explicó. Para robarle a ese hombre es casi imposible

- Yo soy Samantha Ross, soy su hija- su voz suena convincente y puedo ver en su mirada que no miente

Mi mente no puede creer que Samy sea Samantha Ross hija de Robert Ross uno de los mafiosos más grandes de esta generación. Su hija es el diablo en vida. Según los rumores se dedica a la venganza.

Pero lo más sorprendente es que la amo. Amo a Samantha Ross la asesina a sangre fría. La chica que todos temen pero yo solo quiero estar con ella.

¿Enamorada yo? CompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora