¿Enamorada yo? Completa

Capítulo # 38 |No te metas en mi vida

Cristina y Marcos besándose frente a un cementerio. Eso si que es algo no romántico. Aunque en teoría no están frente a un cementerio pero da igual.

- Hola chicos - digo escondiendo mi arma. No pueden saber en que estoy metida- ¿qué hacen aquí?

- Ahhh estábamos...- empieza a decir Marcos

- Nosotros queríamos hablar- dice Cristina avergonzada

- Bueno no importa- les digo- Han visto a Math

- Estabas con Math-me pregunta Marcos

- Si estabamos en el cementerio- le digo sosa

Escucho como unos pasos se acercan a nosotros y dismuladamente saco mi arma. El ruido viene de los arbustos.

- Cristina puede ir a comprar un poco de helado- le paso dinero que hay en la mochila- iré a buscar a Math

- Claro- dice sonriente- ¿necesitas ayuda?

- No- digo rápido no pueden quedarse mucho tiempo- ve estaré bien

- Cuidate y usa protección - dice Marcos antes de irse

Sonrió por su ocurrencia pero es detenido por el ruido de unos pasos acercarse. La persona sale de los arbustos de espaldas. Apunto mi arma en su nuca

- Date vuelta con las manos arriba- digo muy seca

- Samy- la persona se voltea y es Math. Lo abrazo por instinto pensé que se había ido.

- Math hay que irnos- lo tomo de la mano y lo arrastro hasta llegar una zona donde hay más personas. Llegamos al parque que esta cerca de la heladería. Allí pude soltar el aire que estaba en mis pulmones

- Lo siento- le digo a Math por mi culpa su vida corre riesgo.

- ¿De qué te disculpas?- me pregunta tranquilo

- Por mi culpa casi te matan- me siento mal cada vez que recuerdo la pistola en su nuca

- No te preocupes Samy - me levanta del suelo y me abraza- no es la primera vez que me pasa esto

Sus palabra me hacen despegarme para mirarlo a los ojos. Como habrá sido el pasado de Math. Debería preguntarle por el

- Es una larga historia- me dice leyendo mis pensamientos
Hago un puchero y el solo besa mi nariz. Sonrió como estúpida.

No sé cuanto tiempo pero nos miramos creo que más que suficiente. Nuestro rostros se estaban acercando poco a poco. Hasta sentir las respiraciones del otro. Sus labios se veían tan deseables. Mi instinto me hizo relamer mis labios. El poco espacio que nos separaba desapareció.

Sus labios estaban junto a los míos. Ese beso era lento y romántico. Una de sus manos viaja a mi cintura para unir nuestros cuerpo y la otra a mi cuello para profundizar el beso. Mis manos suben a su cabello para sentirlo más cerca. Este beso es demasiado lento hay que acelerar las cosas. Mi lengua desea entrar en guerra con la suya. Al principio duda pero luego de eso se vuelve una bestia. Sus manos me atraen más a el. Necesitaba más salvajismo en el.

Sus besos no eran nada comparados con los de Tyler. Mi mente viajo a los besos de Tyler. A los momentos que pase con el. Sus manos tocando mi cuerpo. No puedo dejar de pensar en el. Siento como si esto fuera un gran error. Una parte de mi se siente como una perra pero la otra dice que se lo merece.

Siento como un jalón me separa de Math. Miro furiosa a quien interrumpió el momento no por el hecho del beso. Si no porque me estaba lastimando.

Narra Tyler

Después de que Math me llamara y me dijera que había pasado en el cementerio el sueño se me olvido. Me puse lo primero que encontré y salí del departamento.