Capitulo 20

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Se sentía extraño. Siempre había coqueteado con mujeres y alguna que otra vez aunque no le gustara admitirlo, había tenido que recurrir a un burdel para saciar su deseo. Pero cortejar a Penelope era otra cosa.

Quería ser romántico, quería darle todo lo que merecía pero cada vez que la miraba su juicio se nublaba y solo podía pensar en la diosa que era. Era absurdo recordar cómo aún cuando había cortejado a su prima, a Marina, siempre buscaba su mirada y su aprobación.

- ¿Cómo te ha ido en casa de Penelope hermano? -preguntó Benedict.

- Bastante bien. Pero siento que no la estoy cortejando bien -respondió resignado.

- Eso es porque la ves como una mujer y nunca la habías visto así. Sorprendela con obsequios, con detalles por más mínimos que sea.

Su hermana Eloise les observaba desde su silla mirando por el rabillo del ojo.Sabía que quería preguntar pero no iba a atreverse. Colin fue hasta donde estaba y se sentó a su lado.

- Eloise vendrás esta noche al baile de los Featherington ¿Verdad?

- Eloise soltó de golpe el panfleto de Lady Whistledown- Por ti haré lo que sea hermano -respondió apenada.

- Necesito comprender por qué dejasteis de hablaros. Erais inseparables.

Eloise miró a su hermano y suspiró con resignación. Quería decirle la verdad pero sabía que ello podría costarle su felicidad y la felicidad de Pen a su lado. No podía arruinarles aquello.No a ellos- Algún día te prometo que lo haré.

- Solo quiero intentar entenderte. Me duele veros así  -confesó Colin.

- Digamos que Penelope me ocultó algo que nunca imaginé que haría. No tuvo la confianza como para contarmelo a tiempo. Y eso provocó que nos hiciéramos daño mutuamente.Ella con sus palabras y yo…con mis actos.

Colin entendió que su pelea no se trataba de una simple riña, iba algo más allá que entendió que jamás iba a averiguar.

- Bueno cambiemos de tema. No quiero ponerte más triste.

- Lo que verdaderamente me pone triste es que alguien intente hacerse pasar por Lady Whistledown -dijo casi enfadada.

Colin tuvo que dejar el bocado en el plato ya que no habia que su hermana estaba tan puesta en Lady Whistledown. Si supiera la realidad de todo se tiraría de los pelos.

- Así que no soy el único que se ha dado cuenta…Es casi insultante como ha escrito esta persona.Lady Whistledown es única. Su forma de escribir es perfecta y es incomparable su narrativa. Es obvio que ella no es Lady Whistledown. Incluso me apostaría a que la verdadera Lady Whistledown estará por Mayfair renegando de este panfleto.

Eloise miró a Colin y él miró a su hermana. Ambos abrieron los ojos con asombro. Eloise sabía  que Penelope era Lady Whistledown y Colin también sabía que lo era. Cogió a su hermana del brazo y ambos salieron al pasillo con rapidez.

- Lo sabes -dijeron ambos.

- ¿Pero cómo es posible que tú lo sepas Colin? -preguntó Eloise aún con toda la sorpresa en su cara.

- Fue en la boda de Anthony y Kate.

- Encontrarás tu propósito, todos lo hacen al final.

- ¿Y tú encontraras al tuyo Penelope? -ella negó con la cabeza.

- Pero me gusta imaginar que sería algo grande y que lograra satisfacerme.Algo que no hablara de quien soy realmente pero sí de quién debo ser. Me haría ser valiente. Me libraría de la insaciable mirada juzgante de mi madre. Mi propósito a fin de cuentas…me liberaría -confesó ante la mirada atónita de Colin.

- ¿Y nunca se te ha ocurrido pensar que puede llegar a tal magnitud? Sueñas mucho más de lo que sueles mostrar a la gente. Creo firmemente que podrías conseguirlo.

- Oh vamos Colin, son simples fantasías. Aunque he de admitir que gracias a ellas tengo momentos en los que puedo enfrentarlos con mis ellas. A eso me aferro siempre.

- Esa forma de hablar sobre la vida y sobre sus sueños no era de la Penelope que se esconde detrás de la multitud para evitar que la observen al no salir a la pista de baile -confesó Eloise.

- Por eso os peleasteis ¿Verdad?

- Eloise asintió- En vez de contarme lo que sucedía prefiero arreglarlo sola. Con el tiempo comprendí que el daño que me hizo fue un mal menor pero en aquel momento me sentí totalmente traicionada.

- A mí me salvó de casarme con alguien que no amaba realmente y me mentía. Incluso intentó decirmelo antes de publicar nada pero no quise escucharla. Simplemente era Pen, nunca la escuchaba realmente.

- Bueno -dijo Eloise cruzándose de brazos- Después de este momento de descubrimiento mutuo…¿Te apetece que averiguemos quien la está suplantando? No me gustaría que echara por la borda el trabajo de todos estos años de Penelope.

- ¿Acaso lo dudas hermana? -dijo Colin cogiéndola del brazo- No hay nada que me atraiga más que desenmascarar a la impostora de mi futura esposa. Y quiero impedirlo a toda costa.

Eloise sonrió al escuchar aquellas palabras y su madre apareció por el fondo del pasillo- Espero que no esteis tramando nada malo que hacer, tenemos que prepararnos para el baile de esta noche.

- Sí madre -dijeron al unísono.

- Y Colin por favor, te pediría que aguantaras un poco más para pedirle matrimonio a Penelope. No quiero que lo hagas de malas formas ¿Lo entiendes?

- Sí madre.

Violet sonrió y Colin procedió a irse a su casa para poder descansar hasta la noche. Presentía que aquella noche iba a ser larga y agitada y quería tener todos los sentidos alerta para todo lo que pudiera ocurrir.

6 de Abril de 1812Donde viven las historias. Descúbrelo ahora