Cuarto

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Presentación

- Dai a estado actuando extraño últimamente - Miró decaida a su pequeño conejo que comía cómodamente su zanahoria.

- El día de ayer estaba nervioso, y hoy mencionó que me iba a llevar a conocer a Zeno Sama... sabes Spike, ahora la que está nerviosa soy yo -

Cuántos suspiros había dado que estaba muy intrigada y nerviosa de todo.

El ruido de la puerta de su cuarto la hizo despertar de su mente.

- Cariño, Daishinkan te está esperando abajo - Tsunade asomó su cabeza viendo como su hija caminaba en dirección a la sala.

Ahí en dónde se encontró con su padre y a Daishinkan-San. El de piel celeste al verla se acercó en paso lento y le tomó de la mano.

- ¿Estás lista? -

- Lista sí, preparada no - Mencionó. Daishinkan solo sonrió casual y besó la mano de mi amada.

- Gracias por todo Amor -

Pidió el permiso correspondiente que fue aceptados por ambos padres un poco dudosos y ambos desaparecieron.

En medio de todo el espacio que ofrecía la galaxia Sakura mirada anonadada todo a su alrededor, sus ojos no se quedaban quietos en un solo punto, mirada y apreciaba hasta lo más mínimo; si esto le hubiese contado a sus amigas, apostaba que la enviarían a un psiquiatra.

- La llegada depende de Zeno Sama- Comentó el de ojos lila.

Sakura en respuesta solo apretó la mano de su amado, su mano empezaba a sudar.
- Sakura, solo se Tú misma -

Ella lo observó, sus ojos en dónde podía perderse con mucha facilidad le dió fuerzas.

- Aún me sigo sorprendiendo de que puedas ver todos los universos -

- Es un placer verlo Zeno Sama - Ahí se encontraba Daishinkan-San, frente a Zeno Sama, el rey de todo

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- Es un placer verlo Zeno Sama - Ahí se encontraba Daishinkan-San, frente a Zeno Sama, el rey de todo.

-¡Volviste! Que bueno, y dime cómo es ella -

- Puedes pasar Sakura - ambos miraron hacia la gran puerta detrás de ellos, poco a poco se fue asomando una delgada y fina figura.

- Un placer en conocerlo... Señor se los universos - Se inclinó como pudo, en señal de respeto.

El pequeño Zen la miró de todas direcciones y Aplaudió
- ¡Eres linda! ¡Sí, sí, así me imaginé, tus papás fueron buenos! ¡Tú también seguro que eres buena! -

Sangre del Linaje SacerdotalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora